Problema del Atleti en el medio

La sala de máquinas del Atlético afronta una semana clave... en dificultades. Thomas Lemar, un jugador con alto protagonismo para Simeone siempre que está sano, salió de Mestalla en muletas y sufre una grave lesión en el tendón de Aquiles. El francés puede perderse casi lo que resta de curso, una baja de larga duración que hace daño al equipo y al vestuario.

Pese a tener un rendimiento irregular, es un jugador diferente a la hora de romper líneas y buscar un fútbol de toque. Aunque sea a pinceladas, su calidad técnica para combinar le situaba un paso por delante que su competencia directa, casos de Saúl y Llorente. Si suele decirse aquello de que a perro flaco todo son pulgas, el Cholo no tiene disponibles a ninguno de sus tres medios titulares en el estreno de Liga. Cuando todos estaban aptos, el técnico se decantó por Koke, De Paul y Lemar para recibir al Granada. Tres jugadores de su confianza y que ocupan en estos momentos la enfermería.

El capitán apenas duró cinco minutos sobre el césped. La baja de Koke es, un año más, un drama para el equipo. El plan inicial del verano pasaba por firmar un pivote que compitiese por el puesto con el jugador con más partidos en la historia del club. No se produjeron las salidas esperadas, o por lo menos a tiempo, y Pablo Barrios ha quedado como esa alternativa en un puesto que no estaba encaminado a ser el suyo. El Atlético ganó un partido de siete sin el vallecano la temporada pasada. Y en esta suma dos pinchazos en tres, para un total de dos victorias en los últimos diez encuentros que Simeone no tuvo a Koke. Un mal que no encuentra remedio. La mejor noticia es que su vuelta está cerca, pero no para la Champions.

A todo ello se ha sumado la lesión muscular de Rodrigo de Paul durante el parón internacional. El argentino regresó tocado de Bolivia y el Atlético se queda sin una pieza determinante en su mejor momento. De Paul había encontrado su sitio, su juego y el fútbol rojiblanco se sentía mucho más cómodo pasando por sus botas. Exhibición contra el Rayo, dos asistencias, de nuevo a gran nivel con la albiceleste... antes de verse obligado a parar. Y se acercan curvas.

Lazio y Real Madrid

El Atlético se estrena este martes en la Champions. La fase de grupos se ha complicado muchísimo en las últimas temporadas y empezar con buen pie es determinante, aunque el curso pasado no se logró materializar la victoria inicial contra el Oporto. Para la visita a Roma, no tiene de vuelta a alguno de los lesionados. Koke se machaca en solitario para intentar estar ante el Madrid. Y De Paul se propuso el reto de estar en el derbi, aunque sin arriesgar su físico, las fechas son muy justas.

Mientras, las cuentas en el medio son fáciles. Simeone utiliza a tres en su esquema titular y tiene sanos a Pablo Barrios, Saúl y Llorente. Recuperar a Witsel para el pivote (el técnico ha repetido durante todo el verano que le ve exclusivamente como central), situar a Riquelme o Griezmann entre líneas o cambiar el sistema son alguna de sus variantes. Barrios está cumpliendo con el reto. A sus 20 años crece, la pide, se muestra y trata de dirigir el juego del equipo. Aunque posicionalmente se nota que el pivote no ha sido su puesto natural en los últimos cursos, se adapta a sus nuevas obligaciones.

Saúl dejó una gran actuación en Vallecas, pero su rol no es el de conductor de juego. Y Llorente suma dos goles en cuatro partidos, pero no acaba de recuperar su mejor versión. Al igual que el ilicitano, su perfil brilla más con el ida y vuelta que con la responsabilidad con balón. Sergio Guerrero en el doble pivote y Cala como medio ofensivo son los refuerzos de Simeone desde el segundo equipo. El Atlético tiene una semana de máxima exigencia por delante. El mal partido contra el Valencia obliga a una reacción rápida. Y las bajas golpean al equipo. Especialmente en un centro del campo que se somete al primer gran examen con dudas y dificultades.