Pepe Rodríguez: “Mbappé vendrá al mejor restaurante del mundo”

José Javier Rodríguez (Illescas, Toledo, 1968), Pepe para sus amigos y seguidores, es el Ancelotti de los fogones. Un hombre tranquilo y sensato, con empatía, buen gestor de equipo y con un talento incuestionable. De hecho, el icónico copresentador de MasterChef, cuya decimosegunda edición se emite actualmente en La 1, tiene su vitrina llena de galardones: dos estrellas Michelín, Cocinero del año, Repostero del año, Premio Nacional de Gastronomía,… Muy madridista desde pequeño, cuando se pone el traje del Madrid, la calma y la mesura se transforman en nervios y excitación. Vive y sufre el fútbol con tanta pasión como la cocina y le gusta picarse con sus amigos colchoneros o culés, como Jordi Cruz, su némesis futbolera y compañero en el jurado del programa culinario más famoso de la televisión. Jordi fue invitado por este diario a participar en la charla, pero declinó amablemente la propuesta debido a compromisos particulares y personales.

¿Cómo vivió la tanda de penaltis de Mánchester?

Estaba en Jaén, porque tenía allí un compromiso y llegué justo a tiempo para ver los últimos diez minutos de la prórroga y la tanda de penaltis. La viví con muchos nervios, pero tenía ahí una cosita que me decía: “Podemos pasar, podemos pasar” ¡Fue una maravilla!

¿Lo considera un milagro o una hazaña?

Un milagro no. Es una hazaña, una más de las que hace el Madrid. Hundido, caído y asediado, pero no se le puede dar por muerto nunca. Siempre resucita, siempre está ahí.

¿Hubo felicitación por parte de Jordi?

No, por supuesto que no. Y eso que escribí a un chat común que tenemos con amigos atléticos y ninguno me felicitó. De todas formas, tampoco lo esperaba.

¿Quién es más futbolero de los dos?

Yo, por supuesto. Jordi ha empezado a ser futbolero porque yo me metía con él, si no él no hubiese sido nunca del Barça.

¿Quién se pica más en los Clásicos?

Yo, sin ninguna duda. Yo sufro, a mí me duele. A Jordi le da exactamente igual, pero yo lo llevo por dentro.

¿Es cierto que su padre era antimadridista y su madre todo lo contrario?

Así es, pero nunca discutieron por fútbol, porque tampoco lo tomaban demasiado en serio. En mi casa no se hablaba mucho de fútbol, pero mi padre de niño me irritaba cuando perdía el Madrid y yo lloraba de rabia. Mi madre siempre ha sido muy madridista, pero no había un gran ambiente futbolero en mi casa.

Y su hermano atlético, ¿a quién apoyará en el Clásico?

Mi hermano es antimadridista también. Es la oveja negra de la familia.

A sus hijos sí les ha educado bien…

Sí (risas). Todos son blancos. No puede ser de otra manera y veo imposible que cambien de equipo alguna vez.

¿A qué jugador del Barça ficharía para el Madrid?

A İlkay Gündoğan. Ya me encantaba cuando estaba en el City.

¿A qué protagonista del Clásico invitaría a cenar y qué le prepararía?

A Jude Bellingham. Le ofrecería un menú degustación de El Bohío, mi restaurante de Illescas, para que supiese dónde está Castilla-La Mancha y se fuese con buen sabor de boca.

¿Ancelotti es el mejor cocinero posible para el Madrid?

Con los años y la experiencia uno se va haciendo más sabio. Tanto él como Zidane han sido dos grandísimos cocineros para el Madrid, lo han demostrado, pero Carletto tiene la sabiduría de los años, el poso, la tranquilidad, el saber hacer… Es el mejor. Sabe no descomponerse, sabe lo que toca y con lo que tiene en la plantilla juega lo mejor que puede.

¿Cuál ha sido su mayor alegría deportiva como madridista?

Ha habido tantas que me cuesta elegir. No sé, es que he visto muchas Champions, muchas finales y muchas copas levantadas de todo tipo. Es demasiado todo lo que me da el Madrid y me resulta imposible escoger un solo momento.

¿De qué Clásico guarda mejor y peor recuerdo?

El peor, cuando nos metieron en el Bernabéu un 2-6. Recuerdo que salí del estadio como si me hubieran dado tres puñetazos en la cabeza. Tenía una sensación rara, de no saber dónde estaba, qué había pasado… Me costó mucho digerirlo. Del otro lado, he visto buenos repasos. Hay un partido que se me quedó grabado cuando los echamos de Copa de Europa en semifinales de 2002, con un golazo de Raúl, que se lo quita un poco a Zidane. Le dijo: “Déjamela a mí” y nos dio el pase a la final de Glasgow. ¡Maravilla pura!

¿Qué jugador rival le ha cabreado más?

Ha habido muchos. A Stoichkov no puedo ni verlo. Y luego, Messi, pero con Messi asumía que era uno de los mejores jugadores del mundo, junto con Cristiano Ronaldo, y lo entendías. Lo de Stoichkov, no.

¿Quién ha sido su ídolo futbolístico histórico?

Uff. Es difícil quedarme con uno. Butragueño, Míchel... De pequeño era Miguel Ángel como portero. Luego, más adelante, Zidane. Ha habido varios, pero si tengo que quedarme con uno solo diré Míchel, con esa chulería maravillosa, con esos centros de lujo con su pierna derecha,…Venga, me quedo con él.

Por estilo y carácter ¿quién serían el Jordi y el Pepe del fútbol?

A mí me gustaría ser Zidane, que es la clase, la elegancia y tocaba el balón como los ángeles. Jordi sería Chygrynsky perfectamente, porque es un paquete.

Si se lo propusieran, ¿iría a preparar un buen menú al nuevo Camp Nou cuando esté listo?

Sí, encantado. De hecho, he estado en La Masia dando una charla con algún exjugador del Barça, a chicos de la cantera, y me han tratado con mucho cariño. Tengo un delantal firmado por toda la plantilla, sabiendo que soy un merengón, pero fue muy bonito. Me pico mucho con el Barça, por supuesto que siempre quiero que pierda, pero le tengo mucho respeto. Me lo pasé de maravilla en La Masia y me trataron de diez, tengo un grandísimo recuerdo.

Ustedes son jueces de cocina, ¿qué le parecen los del fútbol?

Creo que es un trabajo muy difícil el que tienen. El balón va a mucha velocidad y ver exactamente qué es un penalti o una falta es muy complicado. Valoro mucho lo que hacen, pero es verdad que, a veces, con 500 cámaras, y yendo al VAR, hay cosas que dices: “Joder, esto no entiendo cómo no se revisa o no se pita”.

¿El VAR es un ingrediente que ha mejorado o empeorado el guiso del fútbol?

Ha embarrado. Venía para mejorar y lo ha estropeado. No sé por qué. Es un lío tremendo. Habiendo árbitros profesionales que revisan el VAR, que a veces no sean capaces de ver cosas tan elementales… pero es que esa es la magia del deporte, que está hecho por seres humanos.

Si Vinicius fuese cocinero, ¿quién sería?

Vinicius es un cocinero joven que se quiere comer el mundo y que debe tranquilizarse y saber que el mundo a veces nos come a nosotros. Un poquito de poso y menos sobreactuación no le vendrían mal. Es un gran jugador y no necesita sobreactuar.

¿Y Lamine Yamal?

Apunta maneras, puede ser uno de los grandes jugadores de España o del mundo, pero ya he conocido a muchos jugadores jóvenes del Barça que iban para estrellas y no han llegado. Habrá que esperar y ver qué le depara el futuro.

¿Mbappé sería el chef número 1 actualmente?

Mbappé va a venir al mejor restaurante del mundo ¿Será el mejor chef? No. Haremos una brigada de chefs maravillosa, pero es uno de los grandes y aportará la calidad de la gran cocina francesa.

Esta noche arderán los fogones del Bernabéu, ¿qué pronostica?

Me gustaría un 2-1 a favor del Madrid. Apuesto por ello.

¿Pasará factura el agotamiento de Mánchester?

Sí, claro, lógicamente, acabamos de venir de un partido pletórico donde hemos jugado muchos minutos. Pero bueno, son jugadores profesionales y saben lo que nos jugamos el domingo. Carletto sabrá manejar la situación.

Si el Barça no gana, ¿el título estará decidido?

Nos lo pone más fácil. Si el Barça pierde, el camino al título es más tranquilo. Si gana el Barça, ojo, cuidado, hay Liga.

¿Se le atragantaría una derrota?

Claro. Yo lo sufro todo lo que gane el rival, me duele.

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