Otro Guido en doce días

El nombre de Guido Rodríguez siempre se encuentra en el centro de los focos. El argentino, que sigue sin renovar ni aclarar su futuro a las puertas de su final de contrato con el Betis, vio una amarilla ante el Sparta de Praga que supone un problema de consideración para Manuel Pellegrini. Deberá cumplir sanción en el duelo que puede marcar el futuro del conjunto verdiblanco en la Europa League. Será ante el Rangers en el cierre de esta fase de grupos. Y no se trata de una ausencia cualquiera. Marc Roca está actuando como central obligado en esta competición, William Carvalho está lesionado sin que se conozcan aún los plazos de su vuelta y Sergi Altimira no está inscrito. Guardado está solo. Y Pellegrini tiene doce días para fabricar un plan que le entregue otro Guido Rodríguez.

No será una tarea sencilla para Pellegrini, que prefiere de momento centrar sus focos en todo lo que viene. Hay duelos ligueros y de Copa antes de ese compromiso que quizás se envenenó más de lo que había previsto el técnico bético. La caída en Praga no invita al pesimismo, pero el Betis no quiere sorpresas en este cierre de grupo de Europa League, ni puede permitírselas. Hay jugadores que complementan a Guido en el centro del campo, pero pocos que ejecutan su rol. Uno de ellos es Marc Roca, que sin embargo está prácticamente obligado a tomar un rol como central en esta competición porque ni Chadi Riad ni Sokratis están inscritos. Guardado estará en escena, pero su acompañante será una incógnita. Con Isco y Rodri, de otro perfil mucho más ofensivo, Pellegrini podría encontrar más riesgo pero también un grado mayor de creatividad en su esquema.

La vía de Altimira no es posible debido a que no fue inscrito en la competición continental, aunque se antoja probable que el ex del Sabadell tenga minutos de nuevo en la Copa del Rey. Pellegrini cuidará de forma especial a Guardado a sabiendas que su presencia en dos semanas ante el Rangers se antoja vital. En la baraja de candidatos a estar a su lado entran también los canteranos. En este caso, Enrique es el que más tiempo ha convivido con Pellegrini al haber estado en las convocatorias europeas con asiduidad pese a no contar apenas con protagonismo.

Guido vive un momento especial en Heliópolis. Es una baza intocable para Pellegrini y su rendimiento se elevó en las últimas semanas mientras los interrogantes sobre su futuro siguen presentes. Nadie da pistas sobre su decisión. En el club no descartan una renovación, pero tampoco confían plenamente en ella. Saben que un ofrecimiento de altura podría implicar que Guido tomara un cambio de aires a sus 29 años para dar otro salto más en su carrera. Es feliz en el Betis, pero su decisión se verá marcada por muchos factores. De momento, la única realidad que ya conoce el club y también Pellegrini es que reemplazarlo no es una tarea sencilla. Y el choque ante el Rangers será una evidente prueba.

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