Oriol Romeu, las dudas crecen: 11 pérdidas en Oporto
Aumentan los interrogantes sobre su validez para ser el mediocentro titular del Barça. Xavi tuvo que cambiar el sistema para ayudar al de Ulldecona con Gündogan en la salida de balón.
Oriol Romeu ha perdido gas. Brillante en la pretemporada, donde fue de los destacados y gustó mucho, especialmente en el Clásico de Arlington y en el último partido de la gira en las Vegas contra el Milán, el primer tramo oficial del curso se le está empezando a hacer largo. Crecen, pues, las primeras dudas que habían aparecido alrededor del futbolista de Ulldecona. En el Barça, todo el mundo daba por hecho que llenar el vacío de Sergio Busquets iba a resultar imposible, pero Romeu, por quien el club pagó 3,5 millones de euros al Girona, parecía un buen plan de emergencia. Descartado Zubimendi, el preferido por Xavi, por caro, Romeu era un fichaje low cost pero con garantías. Un jugador experto y con la ventaja de conocer la casa, el Barça; y hasta al entrenador, Xavi.
En los últimos partidos, sin embargo, su rendimiento ha caído. En Oporto perdió once balones. Siete de ellos, demasiados para las zonas en las que se mueve, en la primera parte. Estuvo muy inseguro y algo falto de confianza. Xavi lo advirtió y movió ficha. Cambió el sistema. De un 4-3-3, pasó a un 4-2-3-1. Gündogan se puso al lado del ex jugador del Girona y la cosa cambió. Tanto que el alemán dio, desde una posición algo más adelantada, eso sí, la asistencia del 0-1. Fue un movimiento inteligente del entrenador que, sin embargo, deberá estudiar el caso Romeu. El Barça debate estas semanas si es necesario reforzar esa posición de mediocentro posicional que, junto a la de delantero centro, es la que no tiene un recambio específico para los titulares.
Sí es seguro que Xavi hará un replanteamiento general de la situación cuando De Jong y Pedri estén recuperados. Aunque su idea era que Gündogan actuase más adelantado porque es un jugador que tiene último pase (ya lleva cuatro asistencias), si Romeu sigue presentando grietas, podría cambiar su plan y retrasar al alemán junto a De Jong para que Pedri y Gavi completen el famoso cuadrado de centrocampistas. Eso, independientemente de que la posición sea reforzada o no en el mercado de invierno, asunto que no parece sencillo por el fairplay financiero y la opción de que Vitor Roque llegue en enero. No obstante, Xavi también tiene pendiente una charla con Romeu para intentar inyectarle la confianza con la que pareció haber llegado, seguro de sus opciones de aportar cosas al Barça; y que parece haber ido perdiendo en las últimas semanas. Los técnicos no se pueden permitir perder más centrocampistas por el camino.