No hay parón para Isco
El malagueño trata de intensificar su forma física ejercitándose en su día de descanso. Quiere seguir siendo diferencial y ya piensa en el Camp Nou.
Cuatro MVP’s y un puñado de buenas sensaciones. El inicio de campaña de Isco rompió casi todas las expectativas menos las suyas. El malagueño confiaba en ser diferencial en este Betis y lo está consiguiendo con el paso de los partidos. Intocable para Manuel Pellegrini desde que comenzó la Liga, siendo titular en cada uno de los duelos disputados hasta el momento, coloca ya sus miras en un futuro repleto de desafíos. Los quiere agarrar todos. Y no soltar ninguno. Este sábado el jugador no dudó en acudir a la ciudad deportiva para seguir trabajando y realizar ejercicios con el fin de fortalecer aún más su buen tono físico. No hay parón para Isco, ni siquiera en la jornada de descanso que concede Manuel Pellegrini.
El duro calendario que se avecina probará de nuevo a Isco y su papel de pieza decisiva en el Betis. Llega Europa y con ello probablemente se aplicará el sistema rotacional de Pellegrini, aunque el malagueño apuesta por sumar todos los minutos posibles. También mira de reojo al hipotético regreso de Nabil Fekir en las próximas semanas si finalmente deja atrás los plazos iniciales de la recuperación de su lesión. Más allá de haber aterrizado en Heliópolis para tener un rol parecido al del francés, también cree que su alianza con él sobre el campo puede ser una vía de crecimiento para el equipo. Pellegrini quiere tener en escena a todo su talento y no duda que ahí puede nacer otro punto de partida a su proyecto.
Y las miras de Isco también se dirigen al Camp Nou. Ya brilló ante equipos como Villarreal y Atlético de Madrid, pero sabe que tiene ante el Barcelona una reválida inmejorable para demostrar que ha vuelto para quedarse y que su nivel en este arranque no es ninguna casualidad. Pellegrini ve en Isco a un líder de partidos de altos vuelos. Su confianza en él es total y la del propio jugador parece también recuperarse de la mano del técnico que quizás mejor lo comprendió. De momento, Isco quiere objetivos a corto plazo. Y amenazar al Barcelona de Xavi es la siguiente meta.