Navas, un héroe hasta el final

El Ramón Sánchez-Pizjuán despide poco a poco a Jesús Navas mientras el palaciego sigue sumando récords incluso en sus días finales como futbolista profesional. En los prolegómenos del encuentro contra el Rayo Vallecano, Navas recibía un regalo conmemorativo por sus 700 partidos con el Sevilla. Luego, ya en la segunda mitad, el capitán sumaría el número 701. Si todo va bien, durante el mes de diciembre jugará los cuatro últimos.

Parecería que García Pimienta le da como un simple gesto a Jesús estos minutos de las segundas partes e inclusa alguna titularidad decisiva, como la que tuvo ante el Getafe. Pero no es así. Por número, capacidad e incluso alma, este Sevilla necesita a Navas. Ahora mismo se trata del único extremo sano junto a Suso y Lukebakio de toda la plantilla, a la espera de que acabe de recuperarse el belga Idumbo, que debería estar ya para el duelo ante Osasuna de la próxima semana.

El equipo rojillo supondrá otra ocasión para que Nervión muestre sus respetos al niño eterno de Los Palacios. Posteriormente, el Sevilla viaja dos veces a la capital de España para enfrentarse al Atlético y el Real Madrid, con el último partido del año en casa ante el Celta. Los vigueses, rivales justo antes de ir a Chamartín, significarán la última ocasión de ver al capitán en casa vestido de corto. Y el Santiago Bernabéu, pocos sitios mejores, le jubilará de manera definitiva.

Por fin el 30 de diciembre, en plena Navidad, Navas vivirá un merecidísimo homenaje, ya sin balón de por medio. La afición del Sevilla le despedirá en su templo, acompañado de colegas actuales y de otros tiempos, en la Selección, el Manchester City y el Sevilla, los tres equipos de su vida. Además, se esperan incluso actuaciones musicales.

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