Marruecos ‘espía’ a Brahim

Entre los 70.092 aficionados que presenciaron el Real Madrid-Real Sociedad había uno especial: Walid Regragui (47 años). Según pudo saber AS, el seleccionador de Marruecos se personó en el coliseo blanco con una misión clara, ‘espiar’ a Brahim Díaz (24) y tratar de acercar posturas en pos de convencer al mediapunta malagueño para que defienda los colores de los Leones del Atlas. El interés viene de lejos y, de momento, el madridista siempre ha querido esperar la llamada de España, de Luis de la Fuente, pero esta no llega. Un contexto que hace que desde la federación marroquí no entierren el hacha ni pierdan la esperanza. Regragui tuvo la suerte, además, de poder disfrutar de unos minutos de acción de Brahim. El 21 saltó al campo en el 87′ y, como siempre, exprimió su oportunidad al máximo.

Activo y vertical, el atacante regaló una conducción excelente en la que terminó ganando línea de fondo y sirviendo un balón milimétrico para que Jude Bellingham mantuviera su idilio con el gol, algo que evitó una parada sensacional de Remiro. Ancelotti le ha alabado en los micrófonos (”Ha mejorado mucho, sigue teniendo calidad, pero es mucho más potente y ha crecido físicamente”), pero no termina de darle continuidad: apenas 16 minutos repartidos en tres partidos. No obstante, Brahim, lejos de perder la sonrisa, afronta la situación con optimismo. “El míster me dice que aproveche cada minuto y que intente revolucionar el partido. Y así lo hice”, analizó tras otra buena aparición contra el Getafe.

Brahim fue importante con De la Fuente en categorías inferiores. Sin ir más lejos, el actual seleccionador absoluto le hizo debutar en la Sub-19 cuando tenía poco más de 17 años y fue uno de sus habituales con la Sub-21. De hecho, la cuarentena provocada por un positivo en COVID de Busquets hizo que De la Fuente tuviera que jugar un partido con la Rojita con galones de Absoluta. Un duelo ganado de manera brillante a Lituania (4-0) y en el que Brahim jugó los 90 minutos y se abrió hueco en el marcador. Sin embargo, tras ese estreno con asterisco no ha llegado el real. Y es ahí donde radica el problema.

El madridista ha estado en las prelistas de De la Fuente desde que tomó el relevo de Luis Enrique. Su papel preponderante en el Milan, que ganó la Serie A 2022 con Brahim como ‘10′ y llegó a semifinales de la última Champions con una actuación destacada del malagueño (desniveló la eliminatoria de octavos contra el Tottenham con un solitario gol), era su sólido aval. Pero la convocatoria no toca su puerta, tesitura que aprovecha Marruecos, selección pujante tras el cuarto puesto en el Mundial, para seguir apretando. Y Regragui, más allá de personarse en Madrid, no oculta públicamente su postura. “Obviamente que nos interesa Brahim. Sin embargo, hay muchos aspectos en estos casos, y no son nada fáciles de resolver. Uno de ellos es la Copa de África en enero, que no nos ayuda”, dijo el pasado 31 de agosto tras no incluirle en la lista para el parón recién clausurado.

El Real Madrid incrementa la intensidad de los focos que apuntan a Brahim, pero también disminuyen la asiduidad con la que se encienden. En ese escenario, España no le llama a filas, mientras que Marruecos suspira por conseguir el ‘sí' y así poder contar con él en la próxima Copa de África, un torneo que se disputa entre el 13 de enero y, en el mejor de los casos, el 11 de febrero de 2024. De ahí que Regragui apuntase a la CAF como lastre en la negociación, pues el Madrid tendría que desprenderse de su jugador. Hasta ahora, Brahim no ha escuchado los cantos de sirena, dando prioridad a La Roja, pero cada vez es mayor el altavoz. Los Leones del Atlas son conscientes de que han perdido a Lamine Yamal, pero no pierden la esperanza con el madridista. El siguiente parón, con la selección española enfrentándose a Escocia (12 de octubre) y Noruega (15 de octubre), un nuevo capítulo...