ATLÉTICO DE MADRID

Los retos de Simeone en la 2024-25

El Cholo necesita resolver los problemas defensivos y de visitante para volver a pelear por todo. Está a 19 partidos de los 700, Julián para rejuvenecer el proyecto...

Oscar J. BarrosoDiarioAS

La temporada 2024-25 ya se ha puesto en marcha y mañana le toca al Atlético su pistoletazo de salida. Todavía faltan llegadas (Gallagher y un central zurdo), pero las que hay son de calidad para aumentar la competencia interna: Julián Alvarez, Le Normand y Sorloth (también regresa Giuliano y, de momento, Samu Omorodion, João y Galán). Una base importante de la anterior plantilla ha salido (Hermoso, Savic, Memphis, Saúl, Morata y Paulista, además del Profe Ortega y Söyüncü). Y Simeone se enfrenta a un curso exigente, con varios retos por delante.

Seguir batiendo récords

El Cholo afronta su decimocuarta temporada al mando del banquillo del Atlético, desde su llegada en diciembre de 2011, cuando recogió a un equipo hundido. Y antes de finalizar el curso 2023-24, su Atlético alcanzó las 400 victorias (son 402) entre todas las competiciones. La siguiente barrera es superar los 700 partidos dirigidos. Le faltan 19 y en los 681 jugados hasta el momento, su balance es de 402 triunfos, 151 empates y 128 derrotas. 1.140 goles a favor y 560 en contra. En Liga, Simeone alcanzará los 500 partidos en la jornada 22, donde debería llegar con los 300 triunfos superados (son 292 en 478 encuentros). Y también está a ocho de las 200 porterías a cero. En Champions puede pensar en los 150 goles (le faltan cuatro) y las 50 porterías imbatidas (está a tres).

Volver a competir por títulos

El Atlético acabó certificando una nueva clasificación para la Champions (la decimosegunda seguida), pero la cuarta posición (por detrás de Real Madrid, Barcelona y Girona) supuso la primera vez que su equipo caía del podio tras 11 temporadas consecutivas entre los tres primeros, todas las completas del técnico. El Atlético se proclamó campeón de Liga en la 2020-21, pero no ha sido capaz de competir en las tres últimas (a 15 puntos del campeón en la 2021-22, a 11 en la 2022-23 y a 19 en este curso pasado). El Girona ha dado un aviso al Atlético, los equipos que vienen por detrás aprietan. Y los rojiblancos se quedaron muy pronto sin posibilidades de pelear por cotas altas, llegando a peligrar durante una parte del curso la máxima competición europea por la evolución del Athletic. Ganar la Liga ni mucho menos es una obligación, pero el equipo no ha estado ni cerca de pelearla. Y han llegado refuerzos para intentarlo. En Champions cayó en cuartos y se enfrenta a un cambio profundo en la competición que mantiene a todos los clubes en alerta. La derrota en Signal Iduna Park escoció por la oportunidad que se presentaba por delante. Y en Copa del Rey se alcanzaron las semifinales, pero el Athletic fue dueño de la eliminatoria (4-0). El trofeo copero motiva mucho a la afición. Además, este curso se estrena un nuevo Mundial de Clubes donde participará el Atlético y soñará con convertirse en el primer campeón.

Resolver los problemas defensivos

El gran Atlético de Simeone siempre se recordará por su fortaleza como equipo. Y el cholismo irá relacionado con la capacidad de ser rocosos y duros en defensa. Pero esa esencia se ha ido perdiendo. La pasada temporada Oblak encajó 68 goles en los 54 partidos del equipo. Una sangría defensiva que impide competir por cotas altas. La eliminatoria contra el Dortmund es el mejor ejemplo. Anotar cuatro goles a doble partido en Europa siempre fue sinónimo de éxito, pero insuficiente ante los alemanes tras recibir cinco. Los cuatro tantos de Osasuna en el último partido del Civítas Metropolitano para acabar la racha de imbatibilidad como local es otro síntoma, aunque no hubiese ya nada en juego en la tabla. Y el gran debe es la versión como visitante (en la Liga pasada se sumaron ocho derrotas y tres empates fuera). Para volver a ser fuertes atrás el Atlético ha dado salida a Hermoso, Savic, Paulista y Söyüncü, cuatro centrales, aunque el brasileño sustituyó al turco, y llega Le Normand mientras se negocia por un perfil zurdo (Hancko ha sido la prioridad, pero su precio lo complica). Defender no depende únicamente de los de atrás. Pero un gran problema fue la incapacidad para ganar duelos desde lo individual. Oblak ha demostrado en la Eurocopa (dos goles en contra en cuatro partidos y puerta a cero ante Inglaterra y Portugal) que con un equipo bien plantado sigue siendo de élite.

Rejuvenecer la plantilla con Julián como líder

El Atlético afrontó el partido en Signal Iduna Park con un once que tenía un promedio de edad superior a los 30 años. Salen futbolistas veteranos como Paulista (33 años), Morata (31), Memphis (30) y Savic (33). Pese a la renovación de Witsel (35) y Azpilicueta (34), es momento de que los más jóvenes vayan teniendo un papel más protagonista. Y la llegada de Julián Alvarez (24) desborda de ilusión y un nuevo proyecto de líder para muchos años. También se espera que se desencasquille el fichaje de Gallagher (24), un medio con presente y futuro. Lino (24) ya se ha convertido en una pieza clave. Barrios (21) ha ido ganando argumentos en el medio y su oro olímpico y el 8 a la espalda le dan galones. Giuliano (21) da un paso más a la cantera y al futuro. También Riquelme (24) está llamado a dar un paso adelante. Le Normand (27) rejuvenece la zaga, se espera otro defensa con años por delante y Sorloth (28) también resta años respecto a las salidas en la delantera. Vermeeren (19 años) es el futbolista más joven de la primera plantilla, una apuesta invernal para comenzar ese proceso de rejuvenecer el equipo, pero que puede salir cedido.

Dar paso a la Academia

Giuliano es el último canterano en hacerse un hueco en la primera plantilla, después de su año cedido en el Alavés. Carlos Martín espera seguir sus pasos. Riquelme fue el anterior, tras aprovechar sus préstamos y, en especial, su año en el Girona. Pablo Barrios ya lleva 61 partidos en un año y medio. La Academia vive su momento más brillante. El Atleti B ha demostrado su potencial en Primera RFEF, con una cómoda novena plaza, y el juvenil se ha proclamado como el mejor equipo de España al ganar la Copa de Campeones. Mucho talento y futuro. El Jebari, Gismera, Javi Serrano, Kostis, Abde Raihani, Iturbe, Boñar, Diego Bri y compañía son nombres propios en el Atleti B. Y Tevenet se suma al cuerpo técnico de Simeone con el mejor conocimiento de las cualidades del segundo equipo. Torres se hace cargo del filial tras llevar al juvenil al doblete. Con Rayane Belaid, Omar Janneh, Spina, Jano Monserrate, Darío Frey, Julio Díaz, Seydou Fall y David Muñoz como jugadores que concentran los focos, son un valor para el club. Taufik Seidou aprieta con solo 16 años. Que el primer equipo se vaya nutriendo de una cantera tan potente debe ser un reto para el Cholo.

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