Los dibujos de Xavi para el Barça 2023-24
El plan A mantendrá las claves del año pasado, con un sistema asimétrico de cuatro centrocampistas y Balde profundo en la izquierda, pero el técnico maneja más variables.
Las conclusiones tácticas de la temporada pasada y la configuración de la plantilla de este curso permiten hacerse una idea del dibujo que, con alternativas, imagina Xavi para el Barça con vistas a la temporada 2023-24. Para seguir la pista de lo que el técnico piensa para este curso, lo más fácil podría ser buscar las huellas del que Xavi consideró su once titular la pasada temporada. El cual, por cierto, no tuvo la oportunidad de alinear muchas veces. Ter Stegen; Koundé, Araújo, Christensen, Balde; Busquets, De Jong, Pedri, Gavi; Dembélé y Lewandowski.
Es fácil pensar que, de momento, Gündogan ocupará el puesto de Sergio Busquets en el once. Xavi quería un jugador posicional parecido al de Badia y había escogido a Zubimendi. Pero el Barça del año pasado ya jugaba con un doble pivote ‘camuflado’ en el que el capitán guardaba la posición y De Jong se descolgaba. Pedri jugaba algunos partidos en el inicio de la jugada y otros como enlace. Gavi se encarga del trabajo sucio, nada parecido a su rol más protagonista en la Selección. La llegada de Oriol Romeu, en principio, no debería modificar los estatus y, en el Barça, los internacionales (Pedri, Gavi, Gündogan y De Jong) estarían por delante.
En el dibujo fetiche, al menos de momento, de Xavi, Balde hace de carrilero largo para sorprender con la llegada o para fijar a las defensas rivales abriendo el campo; y el Barça, pese a la primera intención de Xavi cuando llegó, sólo mete un extremo. Ese sistema, que ni es un 3-4-3 ni un 4-3-3, y se parece más a un 3-3-3-1 en el que las bandas tienen diferentes alturas y volantes como Pedri y Gavi flotan, tiene variantes más ortodoxas.
Xavi puede optar en algunos por un 4-3-3 más tradicional, con dos extremos abiertos para darle la oportunidad a Ansu o Ferran en la izquierda. Y con laterales más contenidos. El técnico también jugó largo tiempo en Qatar con un 4-2-3-1 para el que esta temporada tiene numerosas opciones en el doble pivote. En este dibujo, Oriol Romeu tendría oportunidades, aunque eso puede generar un problema para encajar al resto de centrocampistas en el equipo. Un once con doble pivote y Oriol Romeu sólo permitiría que, de salida, jugasen dos centrocampistas de entre cuatro de los jugadores con más peso del equipo. Podría generar un problema.
El fichaje de Iñigo Martínez también le puede dar la posibilidad a Xavi de jugar de nuevo con tres centrales, algo que ha intentado sin éxito varias veces en sus dos temporadas en el Barça. Ahí, el Barça podría jugar con una defensa con Christensen, Araújo e Iñigo y podría meter cuatro centrocampistas más dos extremos además de Lewandowski; o incluso los cinco centrocampistas con Gavi metido de falso extremo en la izquierda. Ese sistema prescindiría del poder que le pudiera dar Balde desde la banda izquierda, pero Xavi también quiere manejar alternativas tácticas que puedan sorprender en momentos puntuales de la temporada.