Leganés, mercado de dudas
Los pepineros miran a la ventana cargados de incertezas, sobre todo por potenciales salidas de jugadores no muy contentos con su rol: Haller, Porozo, Rosier o Juan Cruz, entre otros. Esto condiciona los fichajes.
Con el parón navideño la mirada del fútbol español se dirige ya a un mercado que se abrirá oficialmente el 2 de enero y que, para el Leganés, está cargado de incertidumbre. Por ahora, para esta ventana invernal de traspasos sólo hay una certeza: que la dirección deportiva busca con avidez un lateral izquierdo que reemplace a Enric Franquesa (está por ver si ocupando también su ficha) después de su grave lesión de rodilla. Pero más allá de esto, mandan las dudas, especialmente en las salidas, lo que a su vez condiciona las llegadas.
El reparto de minutos esta temporada (salvo Sergio González, ningún pepinero supera el 70% de minutos jugados en todo el curso) ha hecho que en el vestuario blanquiazul haya un buen puñado de jugadores que alberguen dudas sobre su futuro más inmediato. Dos son claros candidatos a una potencial salida de Butarque, aunque ambos casos no serán sencillos. Son Haller y Porozo.
Ambos están a préstamo, así que para que puedan irse a otro equipo deberían, en primer lugar, desear los jugadores encontrar nuevo destino y, más adelante, ponerse de acuerdo los clubes de origen y el Leganés para romper cesiones que, en ningún caso, se pueden acabar de forma unilateral por anhelo de Dortmund o Troyes, respectivamente.
A las oficinas de Butarque no ha llegado por ahora ninguna petición para que uno y otro acaben marchándose, pero al sur de la capital admiten que no serían situaciones descabelladas. En todo caso, a la hora de tomar una decisión primarán los intereses blanquiazules, que pasan por muchos factores… pero sobre todo por encontrar recambios. Porque en toda salida siempre hay que evaluar la posibilidad de añadir reemplazos, algo nada sencillo en una ventana como la invernal y en algunos de los perfiles en riesgo de partida.
Pendientes de Rosier y Juan Cruz
Éste es otro de los condicionantes que modula la postura del Leganés con otros dos nombres que podrían tener protagonismo en este mercado, los de Rosier y Juan Cruz. Ambos estaban llamados a ser importantes en el Leganés, por algunas decisiones técnicas les han hecho plantearse su futuro. Rosier y su frenazo en las titularidades (pasó de jugarlo todo, a no jugar nada) hizo que su nombre surgiera en titulares de la prensa turca, seguramente promovido por su entorno. Tras su paso por Fenerbahce, el lateral derecho goza de gran cartel en Turquía, factor que juega (y mucho) a la hora de decidir su futuro.
Con Juan Cruz su suplencia en los últimos tres partidos (ante el Villarreal, por estar “tocado del tobillo”, como avanzó Borja Jiménez), amén de su sustitución ante el Alavés (se mostró claramente enfadado por el cambio) han hecho que el futbolista no se mostrara muy contento con su situación actual. En su caso se han filtrado supuestos intereses de equipos ingleses, aunque en Butarque no saben nada y, además, no lo dejarán salir a precio de coste como se sugería en algunas de estas informaciones. Cabe recordar que el 40% de un traspaso le pertenece al Betis, su equipo de origen. Asunto diferente es que el jugador pueda plantearse una despedida repentina.
Sólo en el caso de Naim, canterano sin espacio en la pizarra pepinera, parece clara su marcha. Ya la temporada pasada fue cedido al Barça B por no tener espacio en Segunda División y en la actual se quedó en la plantilla forzado, en parte, por una lesión sufrida en pretemporada.
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