BARCELONA
Lamine Yamal: “En mi debut se me taponaron los oídos”
“Es un sueño”, dijo a UEFA de su momento como azulgrana, del que quiso agradecer a Xavi: “No cualquiera me hubiese hecho debutar con 15 años”.
Lamine Yamal es el nombre del momento en el Barcelona. En mitad de los nubarrones institucionales y deportivos que rodean al Camp Nou, la confirmación en la élite del precoz talento marroquí tras su irrupción la pasada campaña desde el filial azulgrana es todo un rayo de esperanza. Tras superar un valle deportivo característico de sus 16 años, el niño prodigio de La Masia se ha asentado con credenciales en el once inicial de Xavi Hernández. Su último servicio, un doblete ante el Granada, evitó un nuevo descalabro culé. Dos goles que abrillantan en cinco goles y cinco asistencias una hoja de servicios que ya ha llegado a la Selección.
“Es un sueño para mí, y creo que para todos los niños que están en el fútbol base, llegar al primer equipo. Muchos entrenadores me han dado confianza, pero no es lo mismo que te den confianza cuando tienes 12 años que cuando tienes 15 para ponerte a debutar en el Camp Nou delante de todo el mundo. Yo siempre se lo voy a agradecer a Xavi porque no cualquiera me hubiera puesto con 15 años a debutar y esta temporada me está dando minutos en casi todos los partidos, o en todos los que he podido”, comenzó contando el de Esplugues de Llobregat a los medios de la UEFA.
En su sueño tiene mucho que ver Xavi, al que le agradece la confianza que le ha otorgado pese a su juventud y los consejos en su primer día con los ‘mayores’ en el Camp Nou: “Siempre me ha dicho que sea feliz, que cuando piense que esté mal siempre habrá algo peor y sobre todo que tenga respeto a la gente, que nunca eres mejor que alguien ni peor, que eres una persona igual que las otras. Me dijo sobre todo que disfrutara, que hiciera lo que hacía siempre en los entrenos. Me dijo que seguro saldría bien y ya está, que saliera a jugar, a divertirme”.
Su debut, del que el próximo 29 de abril se cumplirá su primer aniversario, resultó impactante: “Salí a calentar, de eso no me acuerdo y solo me acuerdo que entré ya. Cuando entré al campo se me taponaron los oídos, no escuchaba nada. Fue como un minuto, pero en las piernas fue como si pasara una hora. Acabé muy cansado y fue un minuto en mi mente, fue muy especial. Cuando salí al parking estaba mi madre y todos muy contentos y muy felices. Al día siguiente ya era entrenar otra vez, así que no duró mucho. Fue un día de mucha felicidad de toda la familia y recibí muchas felicitaciones, pero al día siguiente tocaba entrenar otra vez”.
“Cuando debuté no era tan importante en el vestuario, era como un niño. Ahora tengo más confianza con mis compañeros y creo que se me toma más en cuenta. Eso ha cambiado un poco, pero con el entrenador es lo mismo. Es una relación de respeto”, ha reconocido el extremo derecho, que, sin embargo, se ha definido como un bromista de puertas para dentro. “Me gusta que me las hagan y devolverlas”, confirmó.
Eliminados en la Copa del Rey y con remotas opciones ligueras, la visita europea del Nápoles marcará el futuro inmediato del club: “En la Champions desde el minuto cero es intensidad y cualquier equipo te puede ganar”, declaró. Sobre si preferiría marcar o asistir, Yamal fue claro. “cuando das una asistencia es más felicidad de poder ayudar al equipo o al compañero. En cambio, cuando marcas un gol es más satisfacción. Se te relaja todo el cuerpo y es una sensación que no puedo describir”.