La felicidad de Vermeeren

La principal noticia positiva, y quizá la única, del encuentro ante Osasuna la protagonizó Arthur Vermeeren. El centrocampista pudo, por fin, disfrutar de unos minutos con el Atlético. Entró al terreno de juego en el minuto 71 en lugar de Koke mientras los aficionados del equipo madrileño aplaudieron a rabiar su entrada en el campo. El jugador belga de 19 años se situó en el centro del campo y se le vio activo a la hora de presionar y salir hacia arriba con la pelota controlada. Unos minutos que le hicieron plenamente feliz a un jugador que será parte importante del Atlético 24-25.

Vermeeren estaba especialmente satisfecho por el gran recibimiento que tuvo cuando salió a jugar. Recibió aplausos cada vez que tocó el balón, y mostró un buen rendimiento a pesar del 1-4 y de que la grada no entendió el nivel del equipo ante Osasuna. No fueron unos minutos sencillos, pero Vermeeren los aprovechó. La afición del Atlético tenía muchas ganas de verle jugar y le ha mostrado su apoyo desde el principio.

El belga fue el gran fichaje de invierno del Atlético. El club del Cívitas Metropolitano se anticipó a alguno de los grandes clubes de Europa para hacerse con sus servicios. El Atlético desembolsó 22 millones de euros que pueden llegar a 27 si se cumplen unas variables estipuladas. Una cantidad importante para un jugador básico en el Amberes, internacional con su país y uno de los jugadores con más proyección en el puesto de medio centro.

Vermeeren únicamente ha jugado cuatro partidos de LaLiga, con 102 minutos de competición. Una presencia testimonial para un futbolista que debía ser importante. Pero el Cholo no lo ha utilizado. Tuvo medio tiempo ante el Rayo Vallecano y 19 minutos ante Las Palmas, Cádiz y Osasuna. Muy poca participación para un jugador con un futuro prometedor, con un valor de mercado de 30 millones y con contrato hasta 2030.

El centrocampista ha agachado la cabeza en este tiempo, conocedor de las dificultades de jugar con Simeone.... sobre todo al principio. No protestó, se limitó a entrenarse y a esperar su oportunidad. No jugaba desde el 9 de marzo ante el Cádiz, otro partido que el Atlético perdió. En esta ocasión, 2-0. Pocos minutos, complicados por el resultado, pero ahora suficientes para el belga. El técnico argentino siempre tuvo buenas palabras hacia su futbolista, a pesar de que no jugaba.

“Está a la expectativa. Es un jugador joven, con un futuro importante. Le ha tocado jugar poco como a Vitor Roque en el Barcelona, o Güler en el Real Madrid. Son chicos jóvenes. Hay momentos en los que se les puede usar y otros en los que toca esperar. Ojalá pueda tener minutos para mostrar lo que creemos que tiene y pueda sumar para los que venga”, dijo el Cholo antes del encuentro ante el conjunto navarro. El futbolista acabó muy contento al término del choque ante Osasuna. El Atlético no se juega nada y posiblemente pueda tener minutos ante la Real Sociedad.

Sería una bonita manera de finalizar la temporada para un jugador cuyo futuro está en el equipo madrileño. Simeone confía en él, lo mismo que en Lino, Riquelme y Pablo Barrios. Ellos serán jugadores fundamentales en el Atlético 24-25, en el nuevo proyecto del club madrileño que quiere priorizar jugadores jóvenes, con hambre, con ganas... y con calidad. Y Vermeeren la tiene. El belga fue de nuevo feliz jugando al fútbol. El Atlético fichará un centrocampista este verano. Un jugador de calidad para un medio en el que cuenta con Koke, De Paul y Barrios para llevar la manija del juego. En Países Bajos siguen apostando por Mats Wieffer como futurible del Atlético. El centrocampista del Feyenoord está en el radar del club rojiblanco y veremos lo que sucede en los próximos meses.

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