Iñigo Martínez se gana el más uno
El central del Barcelona disfruta de su buen momento en el equipo azulgrana, elogia a Lamine y la valentía con la que juegan con Hansi Flick
Iñigo Martínez es uno de los intocables de Hansi Flick. El central descansó en la única derrota del Barcelona en Pamplona contra Osasuna y solo no ha completado los 90 minutos en los partidos ante Villarreal y Alavés, en los que fue sustituido nueve minutos antes de finalizar los partidos. Cifras que demuestran que su presencia en el equipo es capital. El tándem que forma junto a Pau Cubarsí es una de las claves del buen rendimiento del Barça en este inicio de temporada.
“La compenetración con Pau es muy buena. Se veía desde el primer partido. A pesar de que él no pudo estar en la pretemporada, es un jugador al que le gusta aprender, atiende y le quedan muchos años por delante, muchas vivencias bonitas y espero que sigamos disfrutando los dos”, reconoce en una entrevista en SPORT. El Barcelona y especialmente su defensa están recibiendo muchos elogios por su apuesta arriesgada, con una defensa muy adelantada y ejerciendo una presión sofocante a los rivales. “Flick, ya desde que llegó, tenía las cosas claras, como quería que jugásemos. Al final, aún asumiendo riesgos, creo que nos da más beneficios que otra cosa. Entonces, nosotros seguimos con nuestra filosofía, nuestra idea. Hacemos mucho daño cada vez que robamos. Que el rival entre muchas veces fuera de juego suele ser complicado para ellos”, detalla. Iñigo reconoce que es a Balde a quien debe echarle más “broncas” para mantener la línea. “Es el más despistado”.
Las victorias ante Bayern de Múnich y Real Madrid han significado un “golpe en la mesa” pero el central quiere mantener los pies en el suelo y no lanzar las campanas al vuelo. El secreto para seguir ganando es trabajar como el primer día. “Esa palabra de favorito no encaja en mi día a día, no entra en mi manera de pensar. Soy de los que cree que hay que aprovechar cada momento y nos está yendo bien”. De los dos triunfos, se queda el logrado contra el conjunto bávaro. “Realmente era un partido donde había que ganar, veníamos de una victoria y una derrota y es la Champions, una competición que mola y ahí no se te pueden escapar partidos”, comenta.
Iñigo Martínez cree que al Barcelona le ha llegado el momento de volver a ganar títulos. “Dejamos pasar unos cuantos el año pasado y ya va siendo hora de que llegue uno”, dice. Con futbolistas con el nivel de Lamine Yamal en la plantilla será más fácil. Él, como todo el mundo, se rinde al extraordinario nivel del joven canterano. “Lamine es un jugador diferencial, un jugador que se ve muy pocas veces y tenerlo con nosotros es una alegría. Muchos balones pasan por él, genera mucho nerviosismo en el rival y se ve, además no tiembla, tiene pausa, genera ocasiones, marca goles importantes... Para nosotros es un jugador fundamental, aún le queda mucho recorrido y esperemos que siga mejorando y verle algún día levantar un Balón de Oro”. Precisamente, sobre el galardón, felicitó a Rodri por conseguirlo. Elogia a Lamine pero el que más le ha sorprendido es Marc Casadó. “El año pasado no tuvimos la oportunidad de poder verle en el terreno de juego tantos partidos como para decir, ostras, lo que aporta al equipo. Creo que está demostrando las cualidades, lo que puede llegar a dar y otro jugador que sale de la cantera. Nadie le ha regalado nada, sino que él, con su esfuerzo, ha conseguido llegar aquí al primer equipo”.
Con la mente únicamente en seguir igual que hasta ahora, Iñigo no se centra en su futuro. Tiene la confianza de Flick y el cariño y respeto del club y los seguidores y sabe que si mantiene su nivel (admite que está en uno de sus mejores momentos) la renovación automática estipulada en su contrato llegará. “Mi pensamiento ahora mismo es jugar todos los partidos que pueda, eso me va a hacer conseguir el más uno que tengo. Siempre con total naturalidad y normalidad, sin presionarme a mí mismo y si tiene que llegar, llegará y si no, pues oye, diré que he estado en el Barça dos años maravillosos y que he estado en el mejor equipo del mundo”.