Gorosabel enreda al Rayo

Andoni Gorosabel consiguió su primer gol en Primera, tras 140 comparecencias, con la camiseta del Glorioso y metió en un serio aprieto al Rayo tras el triunfo de un Cádiz que viene desde abajo buscando el milagro. El equipo franjirrojo está de capa caída: afrontará las diez últimas jornadas con sólo cuatro puntos de margen sobre la zona de descenso. Firma su peor serie de resultados en una Liga de Primera, un solo triunfo en 18 compromisos. Nunca antes, ni con la Real ni con el Alavés, había visto puerta el lateral de Mondragón y lo hizo por todo lo alto.

Se habían vivido momentos tensos en el Fondo de Polideportivo donde una aficionada se había sentido indispuesta cuando el marcador señalaba el minuto 39. Se trataba de una mujer joven que tuvo una bajada de tensión. Tomó un refresco azucarado y se recuperó. El partido se paró, las asistencias subieron a la grada y el médico del club local, Alberto Fernández, también se personó en la zona. Parecía una pausa de hidratación, pero una cuestión urgente de salud. Al final, sólo un susto ya que no hubo ni camilla ni evacuación.

En la vuelta a la actividad, el Rayo compareció más laxo que el Alavés y encajó el gol del guipuzcoano. Antonio Blanco asistió, Carlos Vicente y Samu Omorodion arrastraron a los defensas y Gorosabel resolvió con un balón picadito. Hasta entonces, varias fases en un choque muy igualado. Los locales fueron más intensos al principio (4 saques de esquina en 15 minutos) pero luego el Rayo se hizo con el balón y las cosas se igualaron. Samu creó mucho peligro pero Unai López y Kike Pérez también probaron a un Sivera que cumplía cien partidos con la elástica albiazul. La primera mitad se fue al minuto 51 entre unas cosas y otras.

La segunda mitad arrancó con dos goles anulados por fuera de juego. El primero, de Javi López en el segundo palo y el segundo, de RDT en la portería contraria. El Rayo fue creciendo en posesión pero no en oportunidades claras y el partido fue evolucionando entre cambios, amarillas y saques de esquina. Cuando todo tocaba a su fin, llegó un remate de Isi que sacó, con un paradón, Antonio Sivera. Los tres puntos, oficialmente, se le colocan a Gorosabel pero el portero alicantino evitó el empate con unos reflejos felinos. Su rechace, además, lo tiró Falcao al travesaño para la desesperación total de Iñigo Pérez, que todavía no conoce la victoria con el club madrileño. Mendizorroza estalló y despidió al equipo con cánticos a favor de Sivera, el Alavés y Luis García Plaza.