Garitano y la estela de los técnicos del norte

Gaizka Garitano se puso en la noche del lunes a los mandos del Almería con la difícil misión de reflotar al cuadro rojiblanco. Los almerienses, colistas, apenas han sumado tres puntos de 27 posibles, encajando la friolera de 24 goles (2′67 por partido), los peores números de su historia. A cinco minutos del descenso, el ejemplo de la remontada es el propio Almería de la 13-14, temporada en la que no venció hasta la undécima jornada, con un 1-2 en Mestalla. Garitano lo intentará el domingo día 22 (16:15 horas) en Gerona, buscando seguir la estela marcada por los técnicos del norte peninsular, quienes mejor han rendido en Almería.

Los tres ascensos de la entidad almeriense a la máxima categoría fueron con Emery, Gracia y Rubi a los mandos, destacando también que el Maguregui lo hizo con la Agrupación Deportiva en 1979. Ese equipo ya desaparecido era novato en Segunda División, pero el técnico nacido en el municipio vizcaíno de Miravalles llevó a los rojiblancos a gloria después de haberlo hecho antes con el Racing de Santander en dos ocasiones (1973 y 1975) y con el Celta (1978). Tras el ascenso en el Juan Rojas, hizo de la Agrupación Deportiva una de las revelaciones de la máxima categoría logrando la permanencia con solvencia (posteriormente consiguió un quinto ascenso, en 1984 con el Racing).

Unai Emery repitió la historia (ascenso y equipo revelación una temporada después) en 2007 y 2008. Natural de la localidad guipuzcoana de Fuenterrabía, le dio un salto de calidad al club almeriense, siendo posiblemente el entrenador que más ha calado en tierras almerienses. El pamplonica Javi Gracia logró el segundo ascenso del actual Almería a la máxima categoría, en 2013, marchándose sin renovar tras esa única temporada. El trío lo completa Rubi, nacido en Barcelona y criado en Vilasar de Mar. En 2021 disputó sin suerte la promoción de ascenso, logrando subir en 2022 y la permanencia en 2023. El catalán es el segundo entrenador que más partidos ha dirigido al Almería, con un total de 92, sólo por detrás de los 127 de Casuco.

Garitano, también del norte, busca seguir esa ese camino, rompiendo así con su particular estadística fuera del País Vasco. El bilbaíno probó suerte en Valladolid en el ejercicio 15-16. Con el objetivo de devolver a los vallisoletanos a la élite, el ahora preparador del Almería fue destituido en la novena jornada tras una derrota frente al Llagostera (3-1). Apenas duró nueve jornadas, con un balance de dos victorias, tres empates y cuatro derrotas. Una temporada después también fue despedido, esta vez en La Coruña, en Primera División. El cese llegó tras un 4-0 en Leganés, la cuarta derrota consecutiva y séptima jornada sin ganar. Su paso por tierras gallegas se saldó con cuatro triunfos, siete igualadas y doce derrotas. Si el Real Valladolid se quedó el año anterior en la zona baja de Segunda, ese Depor sí acabó salvándose en Primera División. Pasado ya para Garitano, el vasco busca ahora triunfar en su tercera aventura fuera de su comunidad autónoma.