Fernando: “El Madrid ofreció 500 millones de pesetas por mí, pero no forcé para salir”

Fernando Gómez Colomer (Valencia, 1965) es el jugador del Valencia que más veces ha llevado el murciélago en el pecho (553 partidos). El canterano también tiene el honor de ser el que más veces jugó en Mestalla, de celebración por sus 100 años. De las noches mágicas en la que fue su casa, de los partidos ante el Madrid y de su flirteo con el club blanco habla en AS. Nunca vio peligrar la permanencia en Primera y ahora espera que el club de su vida remate la faena este domingo.

Antes de nada. ¿Qué es de su vida?

Estoy asesorando a un amigo del Novelda, pero eso no es trabajo. Quise mostrarle mi respaldo públicamente. Estoy buscando trabajo después de salir del Castellón tras la venta del club. A la gente le cuesta mucho decidirse por mí (risas).

¿Qué supone para usted Mestalla y sus 100 años?

He pensado mucho en ello. No puedes imaginar lo que significa para un chico de Valencia, del barrio de San Marcelino, ser el futbolista que más partidos ha jugado en ese estadio. Es difícil de explicar lo que supone jugar en el equipo de tu ciudad y durante tanto tiempo. Cuando jugaba notaba apoyo y exigencia. Siempre he creído que Mestalla es un lugar muy familiar, entrañable y que al mismo que se te quiere, se te exige. Esto se convierte en algo positivo y bien llevado para el equipo de casa y es complicado para los equipos de fuera y hasta ejerce de presión a los árbitros. Insisto, me parece un estadio familiar, recogido, donde las gradas están muy encima del terreno de juego y es bastante vertical. Notas que la gente está cerca y puedes sentir lo que los aficionados están viviendo y lo que te piden.

¿Qué sentía cuando salía por el túnel?

Da igual que hayas jugado un año o 15, como estuve yo. Cada vez que vas por el túnel, subes las escaleras que te meten en el terreno de juego y ves la grada de enfrente, la más vertical y miras hacia arriba, te impone. Tienes cosquilleo y el nerviosismo siempre existe porque nunca sabes si vas a jugar bien o mal o vas a ganar o perder. Esto es el fútbol. Esa incertidumbre hace que afrontes todo con nervios y cosquilleo. Y cuando es en Mestalla mucho más porque estás ante tu gente.

¿Le parece uno de los templos del fútbol español?

Sin duda. Los rivales cuando vienen se dan cuenta de lo que es Mestalla, sobre todo lo notan cuando suben esa escalera y entran en el terreno de juego. Además hay que destacar el ambiente. Se nota que la afición vive el partido de principio a fin.

Mestalla, Real Madrid, noches mágicas... Parece la comunión perfecta.

Siempre pasa contra los equipos en los que la afición ha sentido rivalidad, como el Madrid, Barcelona, Atlético, Sevilla... Hemos vivido muchas noches grandes en Mestalla cuando enfrente estaba el gran Depor, los partidos ante el Madrid, Barcelona... Recuerdo perder 3-4 y que la gente nos despidiese en pie. También recuerdo muchas noches europeas en Copa de la UEFA cuando nos tocó el Bayern, Oporto, Roma, Nápoles.... Era como si jugases los cuartos de final de una Champions.

Todo el mundo recuerda la noche de Robert como una de las más especiales...

Los partidos ante el Madrid siempre fueron de mucha igualdad. Aquella noche (temporada 91-92) nos hicieron el 0-1 y pensamos que con mi gol del empate, en el 87′, íbamos a sacar ya algo positivo. Luego, llegó el 2-1 de Robert, en el 88′. Ganarle a un equipo de estos supone mucho y hacerlo en los últimos minutos, mucho más. Es verdad que aquella victoria fue una de la grandes noches que viví en Mestalla.

Ha pasado ya mucho tiempo. Recordemos la temporada en la que casi ficha por el Real Madrid...

Yo iba a la Selección y coincidió en una época en la que en el Valencia no todo era un camino de rosas. Había cierto descontento, la gente parecía cansada de ver siempre las mismas caras... Era un momento delicado. Yo tenía una cláusula de 700 millones de pesetas. Hablando con Butragueño y Míchel me preguntaron por mi situación en el Valencia y yo les dije que si venía alguien con 300 ó 400 millones me podrían vender. Se ve que el Buitre se quedó con eso y ese mismo verano vino el Madrid a por mí. El Madrid ofreció 500 millones de pesetas, pero no me dejaron salir. Yo siempre lo dejé en manos del club porque también quería completar toda mi carrera en el mismo club, en el Valencia. Tampoco hice demasiada fuerza y quise que fuese el Valencia el que decidiese. Nunca forcé ni me arrepentí.

La gente ve a los Diego López, Marí y Guerra como los Tendillo de este siglo...

Los tres han destacado mucho en el Mestalla, en el filial. Cuando hay problemas deportivos y económicos, es cuando la gente de la cantera suele tener su oportunidad. Estos chicos entraron primero en la convocatoria por las lesiones, fueron teniendo minutos porque los que estaban jugando no estaban bien y lo han aprovechado. Se han ganado esta oportunidad, pero el problema es que la gente del primer equipo viene con una reducción de confianza grande, con muchos problemas, malos resultados... Estos chicos vienen liberados de malos pensamientos, de todo vicio, con mente fresca y lo único que quieren es aprovechar esa oportunidad. Esa frescura le ha venido bien al equipo. Siempre pensé que el Valencia iba a salir de abajo aunque ha costado y ha sido gracias a las victorias ante el Valladolid y Celta... Falta poco para solventar la permanencia.

¿Siente debilidad por alguno de los tres?

Los tres tienen posibilidades, pero creo por características y posición, quizá Javi Guerra tenga más opciones de asentamiento. Diego y Alberto también pero son puestos más ofensivos, de más gol y eso depende de rachas y resultados.

Antes le mencionaba el gol de Tendillo. ¿Dónde lo vivió?

Justo subí al primer equipo ese verano, tras aquel gol. Recuerdo que llegamos a Mestalla en autobús después de jugar con el Juvenil y entramos al campo con el partido ya empezado. Vi el gol de Tendillo sentado en una escalera de Tribuna porque estaba el campo a reventar, no tenía sitio, y me acuerdo de aquel gol en el gol sur. Dos meses después, estaba entrenando con ellos.

Entonces, no ha visto peligrar la permanencia en Primera...

No. Hubo momentos en los que se complicaba, pero confiaba en que en algún momento iban a sacar cuatro o cinco puntos para salir de abajo. El empate ante el Villarreal dio muchas cosas y la victoria en Vigo terminó de rematarlo. No he sufrido mucho a pesar de las dificultades porque he pensado que había equipo peores y que podían salir de la situación.

¿Qué Madrid espera en Mestalla?

Será difícil encontrar a un jugador del Madrid motivado al 100%, incluso al 70%. No se juegan nada. Van a tener tres o cuatro partidos de compromiso hasta que acabe esto. Si no juegas con suficiente motivación, puedes tener problemas. El Valencia tiene que darlo todo. No sé si ganará, pero seguro que es el mejor momento para medirse al Madrid.