Fenómeno Giuliano Simeone

El fenómeno Giuliano Simeone se expande y, tras un gran final de temporada con el Alavés, ha trasladado su inspiración a Argentina. Mascherano incluyó al delantero en la última convocatoria de la selección olímpica y el jugador respondió a la confianza con dos goles y derrochando energía y ganas de colarse en la lista final para París. El jugador del Atleti ha despegado.

Giuliano es el tercero de los Simeone en ponerse la albiceleste. El primero, claro, es el propio Cholo, que lo hizo en 106 ocasiones con la absoluta, con la que ganó dos Copas América, y que fue olímpico en 1996 (y medalla de plata). Giovanni, el mayor de sus hijos, también ha alcanzado la selección, fue a los Juegos de Río 2016 y ha jugado con la absoluta seis partidos. El tercero de los vástagos del Cholo, que tiene ahora 21 años, está ya reivindicándose con la Sub-23 y acumulando pretendientes en Primera e incluso de fuera de España.

Para el delantero, la llamada de Mascherano ha sido especial por muchas razones. En primer lugar, porque es la guinda a una campaña muy complicada que empezó en agosto con una grave lesión (fractura de peroné y una luxación de tobillo) que le impidió jugar hasta enero. Tras una dura recuperación pasaba otra cosa: el Alavés estaba en marcha y él tenía que volver a convencer a Luis García, que ya tenía su esquema y su once. Hasta abril no fue titular, pero luego se hizo fuerte en el equipo, caído a la banda izquierda.

Por otro lado, porque le ha permitido regresar a Argentina a jugar al fútbol. Giuliano fue jugador de River hasta 2019, cuando saltó al Atlético, donde ya era entrenador su padre desde 2011. En el club argentino dolió mucho su salida, aunque los rojiblancos abonaron una cantidad en concepto de formación. En esta concentración se ha reencontrado con viejos conocidos, compañeros y rivales de cuando era niño. Y en estos momentos, competencia por entrar en la lista de 18, objetivo que está carísimo.

Con el 11 a la espalda, Simeone brilló con su doblete a Paraguay en un amistoso de preparación. “Estoy muy contento. Pude mostrar un poco de lo que puedo dar”, comentó. En el Atlético ilusiona su progresión e incluso dentro hay quien opina que la garra que pone Giuliano sería de gran ayuda en algunos contextos. El delantero ya ha debutado con el primer equipo rojiblanco, pero todo apunta a una nueva cesión, la tercera tras Zaragoza y Alavés. Propuestas de Primera no le faltan, empezando por el propio equipo albiazul. Pero antes, le ilusiona el reto de los Juegos Olímpicos. El 2024 de Giuliano promete.

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