Fekir despliega sus alas

El triunfo del Betis ante el Manchester United dejó un puñado de buenas sensaciones sobre la mesa. Una de ellas fue el brillante rendimiento de Nabil Fekir, que decidió la cita con un buen gol y estuvo siempre acertado en su intención de crear o acelerar el juego. Para el jugador, hay un reto renovado en escena con miras al 2023 venidero: pretende pulverizar sus discretos números del inicio de campaña para volver a ser diferencial en Heliópolis y ganarse incluso una papeleta de vuelta a la selección francesa. Y sus primeras pinceladas ya están inscritas.

Para Pellegrini, el papel de Fekir nunca dejó de ser relevante. Cuando el francés se ausentó de sus planes por lesión, el técnico nunca encontró sus virtudes en otras bazas del plantel pese a que los resultados no fueron demasiado dañinos. Su capacidad de liderar al equipo en tramos complicados y su factor creativo desde casi cualquier lugar del campo le otorgan un rol fundamental a la hora de que el equipo refleje lo que quiere su técnico.

Fekir mira de reojo al Mundial a sabiendas que podría tener un sitio en esa selección francesa entrenada por Didier Deschamps. Lo tuvo hace cuatro años en el pasado Mundial y ahora pone sus focos en no tirar la toalla tampoco bajo el marco del futuro. Pellegrini le pide más goles y más pases decisivos en los últimos metros. Sabe que ahí está su capacidad de marcar las diferencias.