Falsa alarma con Rüdiger

Rüdiger no tiene lesión, sólo una sobrecarga. Y eso que las alarmas se encendieron con fuerza en el Clásico; superada la hora de juego, comenzó a cojear ligeramente, haciendo gestos al banquillo. Se llegó a sopesar su cambio, pero aguantó. El club decidió esperar dos días para dejar descansar a la musculatura y, hoy, le ha sometido a una resonancia. Con buenos resultados. El jugador está notablemente sobrecargado en la pierna izquierda y de ahí le viene la molestia, pero nada más. No se ha apreciado ni la más mínima rotura. El menor de los males.

Su presencia en Mestalla será duda hasta última hora, pero la sensación general es que podrá jugar. Una decisión que se tomará en función de cómo evolucione los próximos días. Al ser una sobrecarga, los tiempos de recuperación son muy relativos. Será una semana de mucha fisioterapia y ejercicios controlados. Calma y prudencia. Pero se cree que estará disponible el sábado (21:00 horas, Movistar LaLiga). De no jugar, Tchouameni ejercería de central, acompañando a Militao. El club transmite que, de existir un riesgo de lesión, Rüdiger no jugará. Así ha sido siempre. Pero es optimista.

Una lesión en tres años

Y es que no lo llaman Rambo por cualquier cosa: desde su llegada –el verano de 2022– sólo se ha lesionado una vez. Y no fue una rotura, sino un golpe durísimo. La temporada pasada, en Getafe: sufrió una contusión con hematoma en el vasto lateral del muslo izquierdo. Un choque que le hizo sentir un dolor “infernal”, como lo calificaron desde el vestuario. Se perdió cuatro partidos, entre ellos el derbi. Pero nada más. Es el verdadero hombre de acero. Incombustible, pese a jugar prácticamente todo.

No descansa

Desde la lesión de Alaba ha disputado 3.397′, de los 4.320′ que ha tenido el Madrid enfrente. Casi el 80%. Y hay varios matices: de los 923′ que se ha perdido, 360′ fueron en los cuatro partidos que estuvo lesionado y otros 90′, en la visita a la Arandina. Así que el total de los minutos a los que ha tenido acceso se reduce a 3.870′. Y eso lleva a una conclusión: por decisión técnica (siempre en forma de rotación), sólo se ha quedado sin jugar el 12% de los minutos desde la lesión de Alaba. No para. Han sido 47 partidos desde aquel 17 de diciembre de 2023: 38 titularidades, cinco suplencias y las cuatro ausencias por lesión.

Esta temporada ha disputado todos los minutos... menos 83′ contra el Espanyol. Donde Ancelotti le dio un respiro. El curso pasado terminó siendo el segundo de la plantilla con más minutos (4.076′, sólo por detrás de los 4.280′ de Valverde) y esta, va por el mismo camino. Porque Rüdiger vuelve a ser el segundo que más juega de toda la plantilla (1.267′), a la estela de Valverde (1.302′). Son los inamovibles. Los que parecen no tener límite. Rüdiger está bien. Sobrecargado, pero nada más. No hay lesión.