El poderío de Jackson

AIguno en Bournemouth tiene que estar escribiendo en la pizarra mil veces: “No volveré a descartar un fichaje, no volveré a descartar un fichaje...”. Lo de Nico Jackson es tremendo, sin duda alguna el futbolista más en forma hoy en día de la Liga. Amargó la tarde a Espino y desnudó al Cádiz en sus dos goles. Lo suyo es poderío, su juego es explosivo y su zancada imperial. Se fue de cuántos quiso en el 1-0 y demostró seguridad y definición en el 2-0. Nueve goles en poco más de mes y medio. De no ser por su lesión, quizás el Villarreal estaría cerca de la Champions, aunque si no es por esa dolencia, él ya no estaría y los 25 millones que se hubieran recaudado, de cepillo de iglesia.

El Villarreal fue imponiéndose en el partido como botella que se llena bajo el grifo. A su ritmo, hasta arriba. Y eso que el Cádiz arrancó con fuerza, con una ocasión a los 23 segundos. Femenía falló, Sobrino robó y Bogonda remató. Pero ahí estaba Reina, que quería celebrar su partido 1000 como profesional con portería a cero y vaya si lo hizo. A partir de ahí y hasta el final, control del Villarreal, que gracias a su ventaja en el marcador nunca vio peligrar la victoria y le recuerda a la Real que aún le falta un punto para ser matemáticamente cuarto.

Setién tiene jugones y látigos; duerme los partidos con Parejo y Trigueros como los revoluciona con una zancada de Pino o Jackson. Y tiene a Gerard Moreno, que dejó detalles de su nivel y su recuperación. La victoria hubiera sido mayor si el VAR no anula un gol de Trigueros por falta previa de Pino, si bien, la asistencia que se marcó Gerard fue magistral.

Al Cádiz, que pagó con creces los errores en los dos goles de Jackson, se le vio más inspirado cuando Sergio agitó el avispero e hizo cambios. El arreón gaditano en la recta final no le dio puntos, aunque sí sensación de estar vivo. Con eso tiene que quedarse para su ‘final’ contra el Celta del domingo. Aunque si mejora su definición, mejor: ocho remates a portería y tres ocasiones claras. Pero ahí estaba también Reina. Sus paradas más meritorias, una a Escalante tras buena acción de Negredo y otra de Alcaraz. Qué 41 años más bien llevados.