El plan A contra el plan B
El Atlético tuvo un acuerdo cerrado con Gallagher y Javi Guerra para su media. Llegó el inglés, siempre la primera opción del club, aunque el che llegó a estar listo para viajar.
Lo que es y lo que pudo ser. Conor Gallagher, el fichaje de relumbrón para la sala de máquinas del Atlético, y Javi Guerra, su plan B que llegó a estar cerrado para ser rojiblanco. La presencia del valencianista en el Cívitas Metropolitano devuelve a la memoria uno de los grandes culebrones del verano. El Atlético, con la salida de Saúl, quería un medio y tenía dos nombres en la agenda: Gallagher y Mikel Merino. Descartado el navarro, los esfuerzos se centraron en el inglés. Hasta toparse con una pared.
El Chelsea, además de una cifra ligeramente superior a los 40 millones, quería a Samu Omorodion. Y el Atlético se movió para tener una alternativa: Javi Guerra. En una negociación exprés entre Miguel Ángel Gil y Lay Hoon, consejero delegado rojiblanco y presidenta che, el acuerdo quedó cerrado para el pago de 25 millones por el centrocampista de 21 años. Guerra llegó a hacer las maletas, dejó de entrenarse con el Valencia durante dos sesiones (una en el gimnasio y otra directamente en casa) y tuvo todo listo para desplazarse a Madrid. Mientras, el grueso del Atlético viajó a Hong Kong para jugar un amistoso contra el Kitchee con la sensación interna de que sería Guerra el refuerzo en el medio. Un perfil diferente al de Gallagher, con menos experiencia, un diamante a pulir, pero con llegada, calidad, menor inversión y un enorme futuro.
El plan B iba ganando terreno al plan A, a la espera de que el propio Gallagher tomase una decisión para salir de Inglaterra y aceptar la propuesta colchonera. El reloj marcaba el ritmo, si Gallagher no daba el paso Guerra sería el fichaje. Pero el inglés lo dio. Sobre la bocina, el 5 de agosto emitió su okey y las negociaciones entre Atlético y Chelsea se dieron por concluidas con éxito en un pack teóricamente independiente, pero plenamente ligado al fichaje de Samu Omorodion por los ingleses.
Vuelco João Félix
Mientras todo esto ocurría, el Valencia se impacientaba y dio un ultimátum al club madrileño, que terminó por disculparse (según contó Corona) por no poder llevar a cabo la operación después de complacer sobre el papel las expectativas de ingreso de los ches. Un punto final, por lo menos de momento, a un fichaje que había estado acordado en todos los aspectos, pero con la premisa rojiblanca de ser el plan B por si no podía llegar el A, que siempre fue Gallagher. Y todavía quedaba una vuelta de tuerca. Con el inglés en Madrid y Omorodion levantando el oro olímpico, el Chelsea se echó atrás.
Rompió el acuerdo, obligando al inglés a regresar a su país, para iniciar unas negociaciones muy tensas, con Jorge Mendes de por medio, para incluir a João Félix en el lugar de Samu. El Atlético podía quedarse sin los dos centrocampistas, ni el A ni el B. Finalmente todo se cerró y Gallagher pudo estar en la Noche de Bienvenida con Julián, Sorloth y Le Normand y mañana apunta a titular para recibir al Valencia y al medio que pudo estar en su lugar: Javi Guerra. Un jugador que sigue gustando en el Atlético...
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