El Madrid busca portero

El Real Madrid se mueve pensando en el mercado de fichajes del próximo verano con varias cosas en mente: un posible delantero que le dé descanso a Benzema con garantías, Bellingham para seguir con la transición dulce del centro del campo, quizás un lateral derecho... y probablemente, un portero suplente para tener la espalda de Thibaut Courtois bien cubierta. Ese rol hasta el momento es de Andriy Lunin, pero el Real Madrid asume que el ucraniano pedirá salir este verano para disfrutar de los minutos que no le llegan de blanco.

De hecho, ya era esa la idea de Lunin el pasado verano: el ucraniano apenas disputó 510 minutos en sus dos primeras temporadas en la plantilla del Madrid (120′ en la primera y 380′ en la segunda) y, con 23 años, quería buscar un destino donde pudiese jugar de forma regular. Pero fue padre en mayo de 2022 y prefirió quedarse finalmente para no romper su asentada vida familiar en ese momento. El verano que se aproxima ya contará con 24 años y, pese a que este ha sido su curso con más oportunidades, sabe que, mientras esté Courtois en la plantilla, tendrá los minutos muy limitados.

Esta temporada, Lunin ha jugado 1.080 minutos a lo largo de 12 partidos, si bien sólo uno de ellos fue como rotación pura y dura, decidida por Ancelotti: fue en la primera ronda de Copa ante el Cacereño. En los otros 11 partidos medió un problema físico de Courtois que le obligó a quedarse fuera. Y el problema para Lunin es que sus actuaciones no han terminado de convencer: ha recibido 13 goles (su promedio está por encima del tanto por partido; el de Courtois es ligeramente menor esta temporada) y su porcentaje de paradas es del 61%, muy por debajo del 76% que tiene el belga.

Ancelotti ha dejado claro con sus decisiones que confía en Lunin lo justo y necesario: en Copa, la competición históricamente reservada para el guardameta suplente, sólo le dio la primera ronda y le retiró del once en cuanto llegó el primer rival de Primera (el Villarreal). Los problemas físicos de Courtois, que este curso han sido bastantes, le han permitido jugar más de lo previsto, pero Lunin sabe que se trata de una situación circunstancial. Si quiere jugar de forma sostenida, deberá salir.

Tras el duelo copero ante el Cacereño, el ucraniano ya dejó claro que tiene un objetivo y que, de momento, no se está cumpliendo: “Llevo tres años aquí trabajando. Sufriendo y esperando. Trabajando y entrenándome. Pero todo lo hago para algo, no para irme. La idea es quedarse”, explicó Lunin. Ese “algo” es jugar, lo que no sucederá si Courtois está en la plantilla y un relevo generacional no está en el menú, pues el belga está al borde de los 31 años, edad ideal para un guardameta.

Si se confirma la intención de Lunin de salir, el Madrid buscará un perfil similar al suyo: llegó por más de ocho millones procedente de la liga de su país. Ya el pasado verano sonaron nombres para sustituirle si finalmente salía, como el colombiano Ospina, actualmente en el Al Nassr de Arabia Saudí (donde comparte vestuario con Cristiano), o el norteamericano Slonina, que jugaba por entonces en los Chicago Fire, si bien se lo terminó llevando el Chelsea.

Mario de Luis, la opción de cantera

La otra opción es mirar a la cantera, que históricamente ha dado grandes porteros; Iker Casillas fue el último caso. Pero la cosa no está del todo clara. El Madrid firmó el pasado verano a Ferran Quetglas procedente del Mallorca para que jugase en el Juvenil A, si bien no ha dispuesto de demasiados minutos este curso (sí está jugando más en las últimas semanas). Luis López es el habitual tercer portero blanco en los partidos, pero apenas se la ha podido ver en los dos últimos años.

Lucas Cañizares no juega (arrancó como titular en el Castilla, pero duró dos jornadas) y en estos momentos la opción más viable es el titular del filial, Mario de Luis, el que convenció a Raúl y con el que el Castilla lanzó su rendimiento este curso (ha recibido. 26 goles en 31 partidos y ha dejado la meta a cero en 12 ocasiones). De Luis, al borde de los 21 años, acaba de renovar con el Madrid hasta 2025 y, si Lunin termina saliendo, puede jugar un papel en el próximo Real Madrid 2023-24.