El Girona allana su camino hacia la ansiada meta de la Champions
El bloque rojiblanco cuenta con una ventaja de diez puntos respecto al Athletic, quinto. Restan 36 puntos en juego y con la mitad (18) podría servirles para lograr el objetivo.
El Girona tiene en su objetivo lograr la clasificación para la Champions League de la próxima temporada y cada está más cerca de hacer que su tiro pegue en el centro de la diana. La temporada del bloque rojiblanco roza la matrícula de honor y es que ha dejado de ser un sueño lograr el billete europeo para pasar a ser la pura realidad: suma 59 puntos y es segundo. En las 26 jornadas que se le contabilizan únicamente ha perdido tres encuentros (los dos ante el Real Madrid y uno contra el Athletic) y lo más importante es que, tras encadenar tres partidos sin ganar (un empate y dos derrotas), ha logrado levantarse de la lona y recuperar esa aura triunfal. El pasado lunes superó al Rayo Vallecano (3-0) y ha vuelto a la normalidad.
De puertas hacia fuera, en el Girona se sigue destilando humildad y cautela. Pero la afición está desatada. Normal. Se está a seis puntos del liderato, aunque los ojos van más hacia abajo. Y es ahí donde se explota de alegría porque el quinto clasificado, el Athletic, está a diez puntos de distancia y la Real Sociedad, séptimo, a 19. Datos que indican que el curso del Girona está siendo espectacular y el sueño de la Champions League está cada vez más cerca de hacerse realidad. Quedan 12 partidos de Liga (36 puntos) y aunque desde la entidad indican que no es momento de hacer las cuentas de la lechera, a los gerundenses les podría servir con atar la mitad (18). Y no es nada descabellado porque lo que les queda enfrentarse, a domicilio, a Mallorca, Getafe, Atlético de Madrid, Las Palmas, Alavés y Valencia; y en casa, a Osasuna, Betis, Cádiz, Barça, Villarreal y Granada.
En LaLiga pocos piensan que al Girona le vaya a entrar vértigo de aquí al final de curso. Si no le ha entrado ya... y, por ejemplo, el Superordenador de DAZN le da un 97 por ciento de posibilidades de clasificarse para la Champions League. Esto es fútbol ficción, pero lo que es realidad es la entereza de un equipo de Míchel que no presenta ni una sola debilidad. Todo lo contrario. Además, el técnico nunca va a dejar de destilar humildad y eso es muy importante para seguir haciendo historia. Es el primero en dar ejemplo e incluso, tras ganar al Rayo, quiso dar estabilidad y confianza en lo que se está construyendo porque ya avanzó que la próxima temporada, pese a los cantos de sirena de otros clubes, va a seguir en el banquillo del Girona (tiene contrato hasta 2026). Quiere cumplir su vínculo con el club rojiblanco y esto haría de efecto llamada. Pesos pesados del vestuario, como Aleix García e Iván Martín, ya han transmitido también, pese a ser conocedores que les llegarán ofertas importantes, su deseo de continuar.