El espanyolismo exige dimisiones, ceses y que Chen que se vaya

Tan fulminante como el propio descenso del Espanyol a Segunda ha sido la reacción del tejido social. Con sendos comunicados de los pequeños accionistas y de las peñas, y con el mismo denominador común que se palpa en el aficionado de a pie: el proyecto (si es que existe) de Chen Yansheng al frente del club no puede continuar ni un día más. Unas exigencias, contundentes y firmes, que se topan con un pequeño problema: el empresario chino ostenta el 99,6 por ciento del capital social de la entidad.

“El fútbol ha sido cruel con el Espanyol, pero esto no ha de esconder la indignación de los periquitos por la deriva institucional del club que se ha plasmado en el descenso”, subraya el comunicado de la Associació de Petits i Mitjans Accionistes de l’Espanyol (APMAE), la cual exige “ceses de los directivos del ámbito deportivo del club y dimisiones en el Consejo de Administración. La deriva del club es muy preocupante, y desde la humildad pedimos a Rastar (el conglomerado propietario del Espanyol) que analice todas las opciones para que haya un cambio en la propiedad y una refundación institucional del club”.

Se refiere la APMAE a “un nuevo proyecto que implique renovar la propiedad, gestión y dirección del club recuperando las esencias y valores del Espanyol; con la cantera como eje del proyecto deportivo. Proyecto dirigido por profesionales expertos en la gestión deportiva, reconectado con la ciudad de Barcelona, relanzando la presencia mediática e institucional que merece el club”.

Y la asociación va un paso más allá, al solicitar “públicamente una Junta Extraordinaria de Accionistas para poder vehicular estos cambios. Asimismo, estamos analizando todos los escenarios posibles para poder forzar estos cambios, incluido el estudio de posibles acciones judiciales”. Rotundo.

Por su parte, la Federació Catalana de Penyes de l’Espanyol (FCPE), proclama que “dos descensos en tan sólo tres años es un bagaje inadmisible para un club como el Espanyol, una entidad con más de 122 años de historia que parece abocada a repetir, una y otra vez, los mismos errores. Y basta ya. Desde la FCPE entendemos que los responsables de este depropósito no pueden seguir ocupando sus cargos”.

“Después de siete años, el presidente Chen Yansheng, pese al esfuerzo y los numerosos cambios de directivos que ha sufrido el club, no ha sabido dar con la tecla para llevar al Espanyol en la línea de aciertos y éxitos que todos queremos”, sostiene el comunicado de las peñas. Y prosigue: “Pedimos que se ponga remedio de una vez por todas para dejar atrás este pozo negro en que desgraciadamente nos encontramos”.

Y ese pozo, según la FCPE, se debe a una concatenación de malas decisiones que plasma con esta enumeración: “Centramos toda la responsabilidad del descenso del Espanyol en la entidad. Mercados de fichajes totalmente decepcionantes, políticas de renovación de jugadores cuestionables, campañas de captación de abonados realmente poco atractivas, precios inadecuados para los tiempos que vivimos, promociones de entradas con buenas intenciones pero con cuantiosos desajustes (…) Todo ello, sin olvidar la pésima planificación del fútbol base y el fútbol femenino que engrosan, en este caso, la lista de despropósitos del área deportiva”.

Interesante será observar cómo vehicula su hartazgo la grada del Espanyol este próximo domingo a las nueve de la noche, con ocasión del partido ante el Almería, en el RCDE Stadium, que cierra el paso por Primera División hasta que lleguen tiempos mejores. Si los hay.