El dilema de Flick en la mediapunta

Confirmada la baja de Dani Olmo por una lesión muscular en el sóleo de la pierna izquierda sin afectación conectiva y que Raphinha todavía se ejercita en el gimnasio porque sigue trabajando en la recuperación de su lesión en el tercio medio del bíceps femoral del muslo derecho, Hansi Flick deberá encontrar soluciones en la mediapunta para el partido contra el Girona de este sábado en el Lluís Companys.

La más lógica sería poner a Fermín López, que ya se entrena con el grupo aunque todavía no ha recibido el alta médica. Darle de nuevo la titularidad conlleva un riesgo porque ha estado tres semanas de baja por lesión y hay un Clásico a la vuelta de la esquina sin que haya la certeza que Raphinha estará en perfectas condiciones. Olmo ya quedó descartado.

Si Flick no se la quiere jugar con el de El Campillo, puede darle una nueva oportunidad al joven Dro, que ya fue titular ante la Real Sociedad (jugó 45 minutos) y que se ganó al entrenador alemán durante la pretemporada. En la línea de mirar hacía abajo, también está la opción de Toni Fernández, aunque se siente más cómodo en la banda.

Las otras alternativas pasan por un movimiento de piezas y que teniendo jugadores tan polivalentes como los del Barcelona pueden funcionar perfectamente para un partido. Podría entrar Marc Casadó para jugar en la primera línea del centro del campo y adelantar la posición de Pedri o Frenkie de Jong. Ambos saben lo que es jugar por detrás del punta pero donde más están rindiendo es organizando el juego.

Otra opción que existía era poner a Ferran Torres por detrás de Lewandowski pero se esfumó con la lesión del delantero polaco. Rashford también puede jugar más centrado y un poco más retrasado aunque se pierde su explosividad en la banda.

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