LEVANTE

El clan Pepelu: “Baraja quiere que mande”

Los capitanes Gayà y Jaume ejercen de cicerones de un Pepelu al que Baraja ha dado galones.

David González

A Pepelu casi nunca se le ve solo cuando va vestido del Valencia. Su integración dentro y fuera del terreno de juego ha sido rápida. “Desde el primer día me siento uno más”, recalca el centrocampista de Denia. Por los pasillos del hotel Säntispark de Sant Gallen, donde el Valencia se ha hospedado durante su estadía, siempre se le veía acompañado de Jaume Doménech. “A este figura tenéis que cuidármelo”, enfatizaba en Suiza Jaume Doménech al grupo de periodistas desplazados con el equipo.

Pepelu ha encontrado en dos de los capitanes del Valencia a sus cicerones. Jaume, con el que comparte agencia de representación (Wasserman), y Gayà, que le conoce desde hace años por la cercanía entre Pedreguer y Denia y porque además se tratan con el mismo fisioterapeuta. “Me ha sorprendido mucho su personalidad”, comenta Gayà a AS, que futbolísticamente destaca de Pepelu “su inteligencia táctica a la hora de interpretar los espacios y el juego”. Y a la vuelta de Suiza Pepelu encontrará un tercer pilar en el vestuario: Almeida, al que conoce bien de la etapa en la que ambos coincidieron en el Vitória Guimaraes.

Baraja habló en privado con Pepelu en los primeros días de pretemporada y sus charlas individuales con el centrocampista han sido constantes en los cinco entrenamientos realizados por el equipo en Sant Gallen. Las de Baraja y también las de Chema Sanz, su segundo. El fichaje de Pepelu, más allá de ser el primero y hasta la fecha el único, es clave para que el técnico vallisoletano pueda transformar el Valencia en el equipo que tiene en mente, empezando por un dibujo del 4-4-2. “Tanto de 6 como de 8 me siento bien”, apunta Pepelu, un futbolista que da recursos tácticos al entrenador.

Baraja, más allá de su fútbol, confía en que Pepelu aporte su carácter. A pesar de sus 24 años y de ser un recién llegado, el dianense pasa por ser uno de los veteranos del vestuario. Y eso le pide Baraja que sea. “Quiere que mande, que tenga personalidad con balón y también para mantener el equilibrio… que sea yo mismo”, explica el centrocampista, que deja clara una cosa: “Sí, soy yo mismo, desde el primer día estoy muy a gusto aquí y me siento que soy yo”.

A la espera de que Almeida y Guillamón se integren en dinámica de grupo tras su participación en el Europeo Sub’21 y a la llegada de refuerzos para la medular -caso de Amallah-, Baraja tiene a día de hoy un doble pivote que pulir y con el que cimentar el proyecto: Pepelu y Javi Guerra. “Nos entendemos muy bien, somos compatibles”, apunta el dianense. De momento han jugado juntos 45 minutos contra el Spartak Trnava y otros tantos contra el Sant Gallen. En verdad en este último encuentro el plan es que participaran ambos 60 minutos, si bien, por precaución, Pepelu fue sustituido al descanso tras sufrir un golpe en la tibia. “Nada importante”, dice el jugador antes de despedirse de Sant Gallen y regresar a Valencia.

Lo más visto

Más noticias