BARCELONA

Deco, de mentor a fichador de Messi

El brasileño guio los primeros pasos del argentino junto a Ronaldinho dentro y fuera del campo. Messi aprendió a lanzar faltas entrenando descalzo con el ‘20′.

PHIL NOBLEREUTERS

A Anderson Luis de Souza (27-8-1977) le apodaron rápido Deco, diminutivo de Decuzinho. Fue su tío quien se lo puso. Y se quedó para siempre. De la carrera del posible nuevo director de fútbol del Barça. nacido en Sao Bernardo do Campo, en el sudeste de Brasil, se sabe casi todo desde que empezó a jugar, especialmente cuando saltó a la fama con el Oporto de Mourinho.

Fabuloso jugador, centrocampista de ida y vuelta con toque, capacidad de asociación, disparo, recorrido y actitud defensiva, Deco fue el complemento perfecto para Xavi, vio el alumbramiento de Iniesta y se convirtió en una de las referencias del Barça campeón de la Champions en 2006. En aquel equipo ya asomaba la cabeza un pequeño genio que jugaba con dorsal del filial, el 30. Junto a Ronaldinho, Deco se convirtió en el gran mentor de Messi en el vestuario del Barça. El que le enseñó a que empezase a perder la timidez, dentro y fuera del campo. Y una persona clave, por ejemplo, en la fabricación del mejor tirador de faltas del mundo. Messi no lanzaba libres directos cuando empezó a jugar. Lo más, se quedaba después de los entrenamientos a ver cómo lo hacían Ronaldinho y Deco. Primero, Messi empezó a practicar descalzo para ganar potencia en su lanzamiento. Curiosamente, Messi sustituyó a Deco el día de su debut oficial con el Barça en Montjuïc el 16 de octubre de 2004.

Deco dejó el Barça junto a Ronaldinho por imperativo de Guardiola, que consideró que ninguno de los dos era ya una buena influencia para el argentino, a quien pensaba convertir en Balón de Oro como hizo a fuerza de cambiar ciertos hábitos en los entrenamientos, la alimentación y cuidados... Ya sin sus mentores, Messi se convirtió en uno de los mejores jugadores de la historia y también en un reputado especialista en el balón parado.

Deco dejó el fútbol en 2013, pero tenía decidido su futuro. Se abrazó como tantos otros a Jorge Mendes para trabajar a su lado como agente y fundó su propia empresa, D20 Sports, en la que Raphinha es su jugador estrella. Sin embargo, con la llegada de Joan Laporta al Barça, Deco empezó, como Rafa Márquez (hoy técnico del Barça Atlètic) a dejarse ver por Barcelona hasta que el mismo Laporta reconoció que estaba trabajando con el club azulgrana de manera externa (no dejó la agencia) como especialista en Brasil y Portugal. Pero algo más. También empezó a participar en algún fichaje y tuvo relevancia en la incorporación de Aubameyang. Había una explicación.

Deco fue en su día secretario técnico de la la Federación de fútbol de Gabón. Allí llegó, indirectamente, gracias a Laporta y, sobre todo, al ex cuñado del presidente, Alejandro Echevarría, que trabajó en un proyecto con Jaume Ferrer, ex directivo de la primera Junta de Laporta. En Gabón también trabajaría Guim Laporta, hijo del presidente azulgrana. En julio 2015, quien estuvo en Gabón fue… Leo Messi, para inaugurar un estadio en Port Gentil. Aquellas piezas de Gabón podrían tener sentido estos días en el Barça. Alejandro Echevarría, Deco, Messi...

La de Gabón como secretario técnico es la única experiencia de Deco en la gestión de un club. De pronto, y si se termina cerrando su fichaje con el Barça, además de tener que dejar en teoría su propia empresa, D20, para evitar el conflicto de intereses, se encontrará un trasatlántico que debe recortar 200 millones de euros su masa salarial y que, por supuesto, debe rematar la llegada de Messi. De mentor a fichador casi 20 años después. El fútbol no deja de sorprender.

Lo más visto

Más noticias