Coladero en Los Ángeles

La primera tarjeta de visita del Barça 2023-24 fue deficiente. El Arsenal le tiró 19 veces en el impactante Sofi Stadium de Los Ángeles y le hizo cinco goles a un equipo convaleciente aún después del virus, pero con serios problemas de orden táctico en defensa que fue una máquina de conceder oportunidades. Un estreno, en fin, que dejó fría a su gente en un partido que empezó con media hora de retraso y al que el Barça, realmente, nunca llegó. Xavi y su staff cogerán este jueves un vuelo a Dallas con muchas cosas que solucionar antes del Clásico. Porque el 5-3 del Arsenal podrá, tal vez, perderse en la madrugada de Barcelona y tendrá la importancia relativa de cualquier partido de pretemporada. Pero un cara a cara contra el Madrid cuenta como semi-oficial y el Barça deberá estar, como mínimo, más puesto en defensa y con un punto más de tensión porque en la tarde-noche de Los Ángeles le sobró intensidad en los duelos y le faltaron toneladas de concentración.

Tal vez alterados por el tráfico de locos que impidió llegar al Arsenal a tiempo al distrito de Inglewood donde se levanta, impresionante, el SoFi Stadium (5.500 millones de dólares de presupuesto), el partido empezó crispado, con entradas algo extemporáneas, especialmente de Araújo, para una pachanga de verano, y un Barça desorganizado que, sin embargo, se adelantó en el minuto 7, cuando Abde cogió un balón en tierra de nadie y se tiró como un cohete. “Si Xavi me dice que encare, pues encaro”, se viralizó su frase poco después de su debut. El marroquí se tiró a por Saliba, uno de los defensas más prestigiosos a día de hoy, lo desbordó. Lewandowski, a la segunda después de un primer remate de Raphinha, hizo el 0-1 (minuto 7). Pero el Barça se derritió rápido. Saka, una pesadilla para Marcos, empató el partido (minuto 12) después de un error de Christensen que no se hubiese visto la temporada pasada. Poco después, el mismo Saka mandó al limbo un penalti cometido por Araújo en pleno descontrol del Barça, que no tuvo el balón nunca (Oriol Romeu, Gündogan y Pedri pesaron poco en la primera parte), pero que se encontró con el 1-2 en un tiro afortunadísimo de Raphinha que tocó en Odegaard. Pero el Barça volvió a estar tierno y Havertz, uno de los multimillonarias fichajes del Arsenal, empató antes del descanso.

De las once caras nuevas de la segunda parte, la noticia más feliz fue ver a Alejandro Balde corriendo de nuevo la banda izquierda después de su lesión en el tobillo derecho en el penúltimo partido de la temporada pasada contra el Mallorca. Pero el Barça siguió concediendo en exceso en defensa y, al final, Trossard terminó por poner en ventaja al Arsenal con un tiro al rincón izquierdo del Iñaki Peña. Los gunners, con más minutos en las piernas, llegaron cuando quisieron al área del Barça. Los cambios desfiguraron algo el buen plan de Arteta. Dembélé y Balde estrellaron sendos balones en los palos. Trossard, sin embargo, no perdonó e hizo el 4-2. Ferran intentó maquillar el marcador pero Fabio Vieira, en uno de los 19 disparos de los gunners que el Barça concedió, marcó el 5-3. Un resultado grueso que, por más que sea el primer día, siempre es un aviso.