REAL MADRID-BARCELONA

Camavinga, el remontador

El francés ha entrado en 16 partidos en que el Madrid no vencía para terminar ganando. Y Ancelotti cree en él para conservar el resultado: si entra con el equipo ganando, siempre conserva el triunfo.

Jordan Bajo (@jordan13ajo)

Hay una duda en el once del Real Madrid de cara al sábado ante el Barcelona, en el primer Clásico de la temporada. La lesión de Rodrygo ha dejado claro que el Madrid volverá al 4-4-2, con Vinicius y Mbappé en ataque. Y en el medio, Modric cuenta con oportunidades para que el Madrid pueda tener un centrocampista con ideas para encontrar a los dos delanteros y así castigar la valiente defensa adelantada del Barcelona de Flick. Valverde y Bellingham son fijos, lo que deja un sitio entre Tchouameni (siempre que no actúe como central) y Camavinga. El segundo ha ganado mucho peso tras su pasada temporada, en la que fue titular en la final de la Champions. Y como titular, no le pesa la camiseta. Pero sus números como revulsivo desde el banquillo son todavía más elocuentes.

Porque en el Madrid, Camavinga ha sido un remontador, un actor importantísimo para que el equipo blanco le dé la vuelta a resultados adversos. El francés ha entrado, desde que está en el Madrid, en 16 partidos en los que el equipo empataba o perdía para que terminase ganándolos. No ha sido infalible, tiene también ejemplos en que no logró influir para remontar, pero son más aquellos que terminaron con final feliz.

JESUS ALVAREZ ORIHUELADiarioAS

Fueron cinco en su primera temporada, la 2021-22, entre ellos los duelos ante el PSG (3-1) y el City (3-1) en el Bernabéu, remontadas necesarias camino de la 14ª; seis en la 2022-23, todas en una Liga en la que el Madrid no logró llevarse el título; cuatro en la 2023-24, entre ellas un Clásico de Liga, un derbi de Supercopa de España y el 2-1 al Bayern en semifinales de Champions que dio acceso a la gran final de Wembley; y esta campaña ya va un duelo, ante el Borussia Dortmund en el Bernabéu, en el que ingresó con 2-2 y se marchó con 5-2 para los blancos.

Y no es sólo un jugador para cambiar dinámicas, para remontar situaciones adversas. También sirve, y mucho, para conservar ventajas, pues siempre que ha entrado en partidos en los que el Madrid ganaba, el equipo blanco ha mantenido el resultado ganador al final del encuentro. Evidentemente, estas estadísticas que le dibujan como una opción perfecta para salir desde el banquillo no terminarán de encajarle a él, que aspira a instalarse como titular indiscutible en el Madrid. Y Ancelotti también lo cree así: desde que ha vuelto de su lesión, que le impidió arrancar la temporada con normalidad, ha sido titular en tres de cuatro duelos. Pero si no entra en el once, Ancelotti ya sabe que tiene en él un seguro desde el banquillo.

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