Aprobados y suspensos del Sevilla: El gran día de Óliver

No resultó demasiado sorprendente la apuesta de Sampaoli para medirse al Getafe. Tiró de su esquema habitual y colocó a Lamela y En Nesyri como bazas ofensivas para dañar a su rival. Fue el balón parado el que disparó a los suyos antes de que Bono luciera manos disfrazadas de milagro y Rafa Mir expusiera sus tintes de efectividad. Aunque no hay día sin nervios en Nervión. Este 2-1 puso fin a siete meses y medio sin ganar en casa para el Sevilla.

Bono: Salvador, como casi siempre.

Navas: Vuelve a parecerse a Jesús Navas. Y eso es aire para el Sevilla, que lo encuentra con insistencia arriba como en el segundo gol. Atrás, suele ser ya fiable.

Nianzou: Alguna duda cuando cierra atrás, como casi siempre.

Gudelj: El más fiable de la zaga, lo hizo casi todo bien.

Acuña: El campeón del mundo marca diferencias en este equipo y por eso Sampaoli ni duda en darle un lugar de preferencia en su esquema. Esta vez fue diferencial con un remate de cabeza que rompió al Getafe cuando la contienda estaba igualada.

Fernando: Mejoró el equipo cuando adelantó su posición. Su peso en el esquema sevillista es diferencial en cualquiera de las posiciones. Su fuerza y buena ubicación fue clave para sostener la ventaja.

Jordán: No termina de coger el ritmo a los duelos. Se topó con la presión del Getafe y eso condicionó su labor.

Rakitic: El Sevilla le sigue pidiendo más. Y Sampaoli. Tarea suya la de demostrar si es capaz de darlo.

Óliver Torres: El mejor sobre el césped del Sánchez Pizjuán. Se movió entre líneas a su antojo y fue indetectable por momentos. Preciso en la acción del tanto de Rafa Mir.

En Nesyri: Apenas tuvo incidencia en el duelo.

Lamela: Lo intenta, pero sus acercamientos fueron controlados casi siempre por la zaga del Getafe.

También jugaron:

Badé: Primeros minutos del central. Transmitió firmeza en sus acciones.

Suso: No logra reencontrar esa capacidad de desborde que parece olvidada.

Rafa Mir: Un remate letal para colocar el 2-0 y pedir un sitio en el once de Sampaoli.

Carlos Álvarez: Algún intento de ímpetu en los últimos minutos.