REAL MADRID - GETAFE

Aprobados y suspensos del Real Madrid contra el Getafe: Bellingham, enésima exhibición

El británico dio el triunfo a los de Ancelotti en el descuento tras un partido que se le había puesto en chino al Madrid. Gol de Joselu y ‘master class’ de Kroos para darle la vuelta al encuentro.

Kepa: No tuvo mucho que hacer en el primer gol. Mayoral supo pescar en el error de Fran García. Se plantó ante el de Ondarroa y le esquivó con agilidad para poner al Madrid contra las cuerdas. Más mérito del ex madridista que demérito de Kepa. No tuvo después mucho más trabajo, pero cuando lo tuvo respondió con seguridad. En el 56′ atajó un disparo desde la frontal del Getafe que pudo haber sido el 1-2. Dio el susto con un pase que a punto estuvo de interceptar Damián y que pudo costar un infarto a más de un madridista.

Carvajal: De los mejores del Madrid. Estuvo generoso en el esfuerzo, incisivo y bregador, en línea con su arranque de curso. Lo intentó por su banda, pero no se asomó tanto al ataque como en las últimas citas en el primer tiempo. En el segundo, con el Madrid volcado, sí lo hizo. Buscó en todo momento la espalda de Gastón Álvarez y a punto estuvo de marcar incluso. En una de esas internadas, trató de engañar a Soria y, en lugar de centrar, tiró, pero su disparo golpeó de forma violenta en el palo. Ancelotti le retiró en el 76′.

Rüdiger: Partido muy sobrio del alemán. Contundente y concentrado, fue ganador en los duelos y mostró además holgura en cada uno de ellos. Trató de corregir el error de Fran en el gol del Getafe, pero no llegó a tiempo. Líder de la defensa, por delante de Alaba, transmitió rebeldía con el Madrid remando a contracorriente.

Alaba: Salió en la foto del gol de Mayoral. El pase de Fran le pilló con el pie cambiado y Borja aprovechó el resquicio, pero la responsabilidad recae principalmente sobre el lateral madridista. En la segunda mitad cambió su ubicación al lateral izquierdo. Con el Madrid volcado, no dejó de frecuentar campo contrario.

Fran García: Señalado en el gol. Intentó ceder a Alaba, y erró en la entrega. El austriaco no llegó y el balón le quedó en bandeja a Mayoral, que ante Kepa dribló y no perdonó. Cometió después alguna que otra imprecisión que hasta hoy había costado verle. Pero mejoró con los minutos. En el 32′ le puso un potente centro a Modric que a punto estuvo de significar el empate y al filo del descanso, una internada suya en el área pudo igualar el partido. Tras un buen eslalon, se inventó un pase a Joselu, pero, solo ante Soria, el disparo del ex del Espanyol se estrelló en el guardameta. Mejor en ataque que en defensa. Los nervios del estreno en casa le jugaron una mala pasada por momentos y fue el sacrificado, junto a Camavinga, al descanso.

Modric: Su calidad nunca palidece, pero ante el Getafe le costó ponerla en beneficio del equipo en la primera mitad. En su primera titularidad le costó encontrar su zona de influencia. Demasiado orillado a la derecha, no pudo aportar la clarividencia que le caracteriza en los primeros 45′. En los segundo, fue otra historia. La salida de Kroos le dio aire y volvió a reencontrarse con el balón en zonas de influencia y, por ende, con su juego. Se marchó ovacionado por el Bernabéu en el 77′.

Tchouaméni: Con el Getafe replegado en su campo, no emergió tanto como en otras noches en el primer tiempo. Pasó, junto a Camavinga, bastante desapercibido. En la segunda mitad lució más. Carletto le sostuvo en el eje del centro del campo y dejó varios robos de mérito, lo que se le pide. El Bernabéu se lo reconoció y abandonó el campo entre aplausos cuando el técnico transalpino optó por introducir a Valverde en su lugar.

Camavinga: No tuvo tanto protagonismo, no pudo exhibir su poderío como acostumbra y le faltó mordiente. Sí dejó alguna que otra acción de derroche físico, pero se echó en falta finura y algo de precisión por su parte después para redondear esas acciones en las que pudo mostrarse. Ancelotti le sustituyó al descanso por Kroos.

Bellingham: Era el principal atractivo del estreno liguero en el Bernabéu y no defraudó. La presentación del genio de Stourbridge ante la afición madridista, dejó, además de destellos de calidad, la enésima confirmación de que es el nuevo ídolo del madridismo. Marcó en el descuento el gol que le dio los tres puntos al Madrid. No había sido tan protagonista a lo largo del encuentro como en los tres primeros partidos, pero siempre aparece. Provocó un penalti en el 23′ que el VAR acabó anulando y en la segunda, buscó el desequilibrio. Provocó suspiros en el Bernabéu con su elegancia y aplomo con balón. El gol fue el éxtasis.

Joselu: Tiene gol y lo demostró en su debut en Chamartín. Diana de ariete puro, de obrero del área para empatar un partido que se le había echo bola al Madrid en los primeros 45′. Ancelotti le dio la titularidad ante la ausencia de Vini, y en el primer tiempo pasó de puntillas. El italiano mantuvo el 4-3-1-2, y le costó. El nuevo esquema, con un punta a su lado, no es el que más hace brillar sus virtudes. Se desenvuelve mejor cuando es el único estilete. Apareció poco y el equipo no intentó buscarle por alto, donde más destaca, pero en la segunda mitad demostró que puede aportar, y mucho. No necesita contacto constante con el balón ni demasiadas ocasiones para ser decisivo. Hizo el tanto del empate y registró un disparo de mérito para hacer el segundo que Soria desbarató haciendo gala de buenos reflejos. Al filo del descanso, había podido empatar el partido tras un gran pase de Fran García, pero su disparo, sólo ante el portero azulón, lo detuvo Soria a bocajarro.

Rodrygo: Sin Vinicius, le tocaba asumir aún más galones y lo hizo al inicio. Después, echó en falta a su socio habitual. Trató de agitar el árbol, de ser referente en el ataque. Antes del 20′, lo intentó desde la frontal pero su disparo se marchó alto. Se hartó a pedirla al comienzo, y en la segunda mitad siguió en la misma línea. Lo intentó, pero no encontró premio. Registró un travesaño al filo del término del encuentro.

Segunda parte

Kroos: Su entrada al campo cambió el partido. Infundó luz a la sala de máquinas blanca. Pero no solo movió al equipo a su antojo, también pudo anotar tras probar suerte desde la frontal en el 54′. Sin embargo, el palo evitó el gol. En el 55′ dejó un pase milimétrico, de quilates, a Carvajal que pudo haber acabado en gol. Más vivo que nunca.

Nacho: Salió al descanso para formar en defensa con Rüdiger y estuvo correcto. No tuvo apenas trabajo ante el paso atrás del equipo de Bordalás en los segundos 45′, pero hizo de capitán con el Madrid en busca del empate.

Lucas Vázquez: Su disparo puso contra las cuerdas a Soria y permitió a Bellingham aprovechar el rechace para culminar la remontada. Siempre un recurso de garantías.

Brahim: Salió con 15 minutos por delante y dejó un pase de fantasía a Joselu que permitió al gallego plantarse solo en el área. El 14 la cedió atrás y el pase no encontró rematador, pero debe seguir acumulando detalles de mérito en los ratos de los que disponga si quiere convencer a Ancelotti.

Valverde: Fue la principal rotación. Se quedó en el banquillo en favor de Modric y salió por Tchouaméni a falta de más de diez minutos de partido. Exhibió poderío en carrera y contribuyó a mantener al Madrid con energía en el tramo final de partido..