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Aprobados y suspensos del Betis: Pócima de Fekir con picaresca

El idilio de Juanmi con el gol se alarga en el equipo de Pellegrini, que se da un festín con los regalos del Elche

CRISTINA QUICLERAFP

Pellegrini fue el mejor antídoto para que el Betis se olvidara del esperpento de sus dirigentes para desenredar las inscripciones pendientes. La expulsión ilicitana le abrió la veda a los verdiblancos, que levantaron el telón con una fiesta en el Villamarín.

Rui Silva: Una oportuna intervención desactivó un lanzamiento venenoso de Mojica todavía con el empate.

Aitor Ruibal: Una arrancada espectacular desde la medular provocó la expulsión del bisoño John Donald en el minuto 16.

Pezzella: Providencial para despejar de manera acrobática un gol cantado. Más activo en la reanudación.

Édgar: Sufre con delanteros móviles, como Pere Milla o Roger Martí. Muy atento en los cruces para corregir los desajustes.

Álex Moreno: El jugador con más profundidad del Betis. Sus galopadas son puñales. Incansable.

Guido: El comandante de la presión verdiblanca.

William Carvalho: Pase medido a Juanmi para encarrilar la noche con el 2-0.

Rodri: Un disparo con veneno muy al principio. Poco más. Tenía la papeleta de sustituir a Canales. El físico le da para poco.

Fekir: Amarilla tempranera por una de sus desconexiones de cables. Su perseverancia para aprovechar la torpeza de Roco acabó en gol. Un globo lejanísimo pudo ser el tercero. Pellegrini lo relevó pronto, porque auguraba la roja.

Juanmi: Su idilio con el gol no se apaga. Doblete. Pese al mal control en el segundo, aprovechó el aciago encuentro de Roco para orientarse y batir a Édgar Badía. Y falló el tercero.

Borja Iglesias: Astuta carrera al segundo palo, cuando advirtió el robo de Fekir. Estrenó la cuenta verdiblanca esta temporada con un remate a placer.

CAMBIOS

Rober: Con el viento de cola, disfrutó de minutos para intentar lucirse.

Fran Delgado: Pellegrini no quiso riesgos con la amarilla de Ruibal y premió al canterano.

Loren: El descontrol en las cuentas que exige la Liga de Fútbol Profesional le dio una oportunidad inesperada.

Miranda: No le dio tiempo a nada.

Paul: Minutos intrascendentes. Un disparo suyo estuvo a punto de dar el liderazgo en la tabla.

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