UD ALMERÍA 2-3 REAL BETIS

Aprobados y suspensos del Almería: la defensa echa por tierra la capacidad de reacción

Luis Suárez tira de un Almería que hace agua a nivel defensivo. Samu Costa, que anota junto al colombiano se afianza en el once.

Carlos Barba

Fernando. En el minuto 2 le sacó una buena mano a Canales. Volvió a ser de los mejores de un Almería que tiene que mejorar en el aspecto defensivo.

Pozo. Volvió a demostrar que no está en su mejor momento y eso que comenzó bien poniendo un buen centro en el primer minuto, al que no llegó Portillo para rematar. Después sufrió a nivel defensivo, con Juanmi y Canales. Se hizo daño antes del descanso, aguantó y se quedó en la caseta. No parecen revestir gravedad esas molestias musculares.

Ely. Mejor que Babic, tampoco terminó de mostrar un gran rendimiento defensivo. La acción del 1-1 surgió de un despeje suyo tras un saque de banda de Abner. Minutos después se marchó lesionado por molestias musculares. Resta por ver cuánto estará de baja.

Babic. Sufrió con Borja Iglesias y en cada acción en la que tenía que correr para atrás. Aparece en la foto del 0-1 al fallar en el despeje. También participó en la jugada del 2-2 al prolongar para que Samu remachase.

Akieme. No fue su mejor tarde. En el gol de Rodri, Canales percutió por ese costado después de una subida del hispano-ecuatoguineano, sin bajar este con la velocidad necesaria. En el 54′ le metió un buen balón a Luis Suárez, repeliendo Rui Silva el disparo del colombiano.

Samu. Mejor que en ataque que en defensa, echándose ese paso al frente en cuanto a las coberturas se refiere. Aun así, fue de los mejores rojiblancos. Ya asentando en el once en detrimento de De la Hoz. Buscó el gol constantemente, rematando prácticamente todos los saques de esquina que sacó su equipo. En uno de esos córneres vio portería rival 692 días después (no anotaba desde marzo de 2021, en Ponferrada). Once minutos antes, Alberola Rojas le invalidado un gol en una falta lateral por fuera de juego de Melero, que asistió al portugués.

Embarba. No apareció prácticamente en todo el partido. Pasada la hora de juego probó a Rui Silva, marchándose sustituido poco después.

Eguaras. Fue el elegido de sustituir a Robertone. Metió un buen pase a Embarba en la acción del disparo de Luis Suárez al cuarto de hora. Guardado le ganó la partida en el 2-3 para cabecear el saque de esquina botado por Canales y darles el triunfo a los sevillanos. Fue amonestado y se une a la amplia nómina de apercibidos.

Melero. Perdió más balones de los que acostumbra y no terminó de dar ese último pase que tan bien se le da. Asistió a Samu en el gol anulado del minuto 51.

Portillo. La otra novedad en el once tampoco entró en contacto con el balón como le hubiese gustado. No era titular desde el partido en Bilbao, a finales de septiembre.

Luis Suárez. El mejor de los almerienses. En su tercera titularidad consecutiva anotó su segunda diana como rojiblanca. Fue en el minuto 26, cuando aprovechó un mal despeje de Guido para ganarle la partida a Pezzella y fusilar a Rui Silva. Poco antes se quedó a escasos centímetros del gol con un disparo cruzado que se marchó rozando el palo izquierdo del portugués. En la segunda parte el portero del Betis le sacó una manopla en un remate previa asistencia de Akieme. También participó en el 2-2 al meter el balón en el corazón del área. Se le nota muy adaptado y cada vez va a más.

Chumi. Entró en la primera mitad por el lesionado Ely ofreciendo unas prestaciones similares.

Mendes. Jugó la segunda parte y si bien no se prodigó demasiado en ataque, cumplió a nivel defensivo.

Touré. Tuvo el 3-2 en sus botas con un zurdazo en el 66′ tras una cabalgada suya. En la recta final no conectó el rechace de un disparo de Ramazani.

Ramazani. La tuvo a falta de cinco minutos para el final con un disparo con la zurda.

Vinicius. Se colocó por la izquierda, sin generar demasiado peligro.

Rubi. Optó por Eguaras y Portillo para sustituir a Embarba y Baptistao. Su equipo hizo agua en defensa y, como explicó en la rueda de prensa posterior al partido, meditó cambiar el dibujo para colocar a tres centrales. A pesar de los fallos defensivos, el Almería lo intentó en todo momento, teniendo una gran capacidad de reacción para terminar el encuentro fundido. En el ecuador de la segunda mitad pasó a un 1-4-4-2, quitando a un centrocampista, caso de Melero, para meter a Touré. Tras el gol de Guardado buscó velocidad por las bandas con Ramazani y Vinicius. Tras el partido hizo mucho hincapié en que su equipo siempre quiere ser ofensivo.

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