Girona-Atlético de Madrid

Aprobados y suspensos de un Girona insalvable

Los gerundenses, siempre a remolque. Witsel tuvo el 1-1, pero Oblak firmó un paradón. El equipo pasará la Navidad en descenso.

Judit Cartiel
Redactor de Sección de Fútbol de Diario AS desde 2013. En 2011 entró en Diario AS como becario, después pasó a colaborador y ahora es su casa. Le gusta seguir y escribir de todos los deportes, pero ahora le podrás leer sobre fútbol y vela. Licenciado en Periodismo por la Universitad Abat Oliba CEU de Barcelona.
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Gazzaniga: El portero acabó bien el año y eso que tuvo muy mala fortuna. Paró lo parable. No pudo hacer absolutamente nada ante el golazo de Koke y en el 0-2 de Gallagher se vio sorprendido por el toque de Vítor Reis. Hizo una buena intervención, en el 42′, ante un disparo de Gallagher y aunque estaba en fuera de juego también detuvo un cabezazo de Marc Pubill.

Francés: Fue el elegido para jugar de lateral derecho porque Arnau Martínez pasó al centro del campo. No se vio excesivamente achuchado, pero la fatiga le pasó factura y acabó sustituido por Hugo Rincón.

Vítor Reis: El central salió en la foto del 0-2, por pésima suerte. No acertó a despejar bien el balón de Gallagher. Lo hizo en dirección a la portería y se metió el gol en propia puerta.

Blind: Se le vio sufrir con los balones a la espalda y en el cuerpo a cuerpo con Sorloth. En la salida de balón se le vio aseado, como siempre, y la gran muestra fue un gran pase a Álex Moreno que le dejó en el mano a mano con Oblak.

Álex Moreno: Controló bien su parcela a nivel defensivo. Tiene acostumbrada a la afición del Girona a sumarse muchas veces al ataque, aunque se le vio con miedo de dejar su banda a Giuliano. Al final, cuando ya no se debía guardar nada, tuvo una gran oportunidad para marcar, pero se topó con Oblak.

Arnau Martínez: Juegue donde juegue siempre aporta. Se confirmó que es el comodín de Míchel porque le colocó en el centro del campo para intentar frenar el ímpetu de Barrios y poner serenidad, y calidad, al juego. Fue el asistente involuntario en el golazo de Koke. En la segunda parte vio una tarjeta amarilla que protestó mucho y le costó el cambio.

Witsel: Tuvo una ocasión buenísima para el 1-1, con una remate con la pierna izquierda dentro del área, pero Oblak se lució. Intentó manejar el centro del campo. Su ilusión y ganas no se contagiaron a la mayoría del resto de sus compañeros.

Iván Martín: Le faltó tener muchísimo más contacto con el balón. Al tener a Arnau y Witsel a su lado gozó de libertad de movimientos. Fue un arma de doble filo porque también tuvo demasiado terreno que abarcar y se quedó en territorio de nadie. Fue sustituido en el 70′.

Tsygankov: Venía de firmar un doblete ante la Real Sociedad y con el cartel de líder del equipo y todo se difuminó. Apenas entró en contacto con el balón y le faltó inspiración cuando lo tuvo. En el 70′ fue sustituido. Partido muy deslucido.

Joel Roca: Fue el único que tuvo alguna mínima oportunidad de intentar el uno contra uno. No tuvo toda la fortuna del mundo, aunque intentó filtrar balones a Vanat. Míchel le sustituyó al descanso.

Vanat: No disfrutó de ninguna oortunidad. No logró superar la defensa atlética. Partido nulo.

Asprilla: Es un jugador de fogonazos. Su ‘problema’ es la falta de continuidad. Firmó regates muy interesantes. Eso sí, lejos del área.

Bryan Gil: Poca incidencia. Se le vio mermado por su herida en el pie.

Hugo Rincón: Intentó dar oxígeno a su equipo. Poco más.

Lemar: Se le vio con ganas de reivindicarse, aunque por momentos pasado de revoluciones.

Solís: Sin incidencia.

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