Aprobados y suspensos de un Espanyol que no afloja

Dmitrovic. La tranquilidad y la seguridad que transmite, semana tras semana, no tienen precio. No tuvo ninguna intervención de mérito hasta el descuento porque el Getafe no le exigió y, cuando llegó el peligro, apareció. Por arriba lo cogió todo.

Omar. Pese a ver una amarilla temprana no se vio condicionado por este hecho en un partido donde las faltas estuvieron al orden del día. Inteligente en defensa, controló bien su banda en todo momento.

Calero. El momento de confianza de Calero es inmenso y eso, lógicamente, potencia sus cualidades. Está en el mejor momento desde que firmó por el Espanyol habiéndose convertido por méritos propios en titular indiscutible. El partido ante el Getafe fue un argumento más a su favor.

Cabrera. Este era un partido que encajaba perfectamente con las cualidades de Cabrera y que Cabrera resolvió perfectamente. Insuperable por alto, sin riesgo a su espalda, estuvo cómodo pese a la insistencia de Adrián Liso. Y si a su partido inmaculado en defensa le sumamos el gol pues es ya un partido de diez.

Romero. No fue un partido ni fácil ni fluido para Romero. Sin balón, sin control del juego, es evidente que Romero brilla menos. Pese a ello demostró que también es un jugador para este tipo de partidos. Más que correcto.

Urko. Partidazo de Urko, que se vació en un trabajo espectacular. Cortó todo lo que pasó por su zona, cayó a ambas bandas para ayudar a los laterales y se hartó de despejar balones. Fue clave en el devenir del partido.

Edu Expósito. Tuvo una muy clara con un disparo centrado, pero al final su capacidad para servir el balón parado volvió a suponer tres puntos para el equipo. Con él en el campo el Espanyol puede generar peligro tanto en juego como en cualquier acción aislada, lo que le convierte en un futbolista fundamental.

Jofre. Tenía el difícil papel de suplir a Dolan y cumplió con creces. El más rápido del equipo, logró generar peligro con alguna conducción vertical. De hecho, habilitó a Roberto en más de una ocasión. Fue el primer sustituido, acabando evidentemente muy cansado.

Pere Milla. Rondó siempre el peligro pero no acabó de materializarlo. Marcó un gol en claro fuera de juego. No fue su mejor partido, pero entendió que tocaba trabajar para sacar algo positivo de Getafe.

Roberto. Le pegaron hasta en el DNI. Recibió innumerables faltas, algunas las pitaron y otras no, en una lucha incesable con los dos centrales. Acabó magullado y exhausto tras vaciarse en un partido complicadísimo.

Kike. Se partió la crisma, literalmente, con los centrales del Getafe. Bajó varios de los balones largos en un trabajo impagable. Entró más en contacto con el balón que Roberto, le faltó cierta finura, pero en líneas generales firmó un buen partido. Falló un gol cantado que no tuvo ninguna incidencia porque estaba en fuera de juego.

Pickel. Buenos detalles en los minutos que estuvo sobre el campo.

Rubén. Estiró al equipo y ayudó en defensa.

Pol Lozano. Sin incidencia.

Miguel Rubio. Entró para amarrar el resultado.

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