Ancelotti: “Entiendo la decisión de Xavi”
“Poco a poco te acostumbras y comprendes que la presión es la gasolina para hacer mejor tu trabajo”, opinó el técnico. Dejó la renovación de Modric en sus manos y pidió paciencia con Güler.
Ancelotti sabía que le iban a sacar el tema, así que optó por la elegancia. Por la empatía. Habían pasado 63 horas de la bomba: Xavi anunció que no seguirá en el Barça a partir del 30 de junio. Su homólogo en el enemigo, abandona. No había que ser muy astuto para saber que el tema saldría. Y aunque la primera pregunta le sacó una sonrisa, rápidamente se puso serio. Ante todo quiso evitar comparaciones (hasta dos veces lo repitió), limitándose a decir que respeta a cada uno, pero zanjando que “entiende” la decisión de Xavi.
Preguntado por la presión, señaló que nunca ha sentido tanta como en la Segunda División de Italia (“le dije a mi asistente que no llegaría al 2000 y aquí estamos, en 2024″). Esta vez no confirmó al portero, dejó la renovación de Modric en sus manos y opinó sobre Güler: “Entiendo que hay mucha presión sobre él, porque todo un país, Turquía, quiere verlo jugar en el Real Madrid, pero el niño tiene 18 años... Llegará su hora”.
Rueda de prensa
―¿Cómo de difícil es la visita a Getafe?
―Crucial, muy dura, pero el equipo está bien y plantearemos un gran partido. Somos sólidos, jugamos bien al fútbol y nos sentimos contundentes. Será exigente, pero tenemos la confianza intacta. Es crucial, repito.
―¿Para usted es “cruel” sentarse en el banquillo del Real Madrid?
―Sabía que saldría esta pregunta (ríe). Sólo quiero decir una cosa y no quiero comparaciones. Tenemos (los entrenadores) un trabajo fantástico, con presión, lo cual es normal. Y yo respeto a todos, sus palabras y pensamientos. Sea Xavi o cualquier otro.
―¿Entiende la decisión de Xavi?
―La entiendo.
―¿Usted ha sentido algo como lo de Xavi? Que no se le valora, o que “haga lo que haga, nunca es suficiente”...
―Como he dicho, respeto sus decisiones y sus pensamientos. Ya está, lo que no quiero son comparaciones.
―¿Qué hay que hacer para no ir tan a contracorriente en tantos partidos? Por aquello de las remontadas...
―Marcar primero... ¡Eso estaría bien! Pero, como dije, si nos toca remontar y lo hacemos, significará que tenemos recursos.
―¿Le gustaría que Modric renovara?
―Es una leyenda del fútbol y de este club. Las decisiones para la próxima temporada las tendrá que tomar él.
―¿Ha hablado con él aquello de que “si estoy seguro de que va a jugar, no calienta”?
―Dije lo que pienso, nada más. Un joven como Güler si calienta y no juega, no pasa nada; pero Modric, con 39 años (es un lapsus, tiene 38), cinco Champions y siendo una leyenda... yo no puedo hacerlo. Él lo sabe.
―Hablando de Güler... ¿Qué consejo le daría?
―Progresa bien, cada día está mejor físicamente, acostumbrándose a la intensidad de este fútbol. Ahora está bien y tendrá minutos. Pero, como dije, hay que ser pacientes... (ríe) Entiendo que hay mucha presión sobre él, porque todo un país, Turquía, quiere verlo jugar en el Real Madrid, pero el niño tiene 18 años. Llegará su hora.
―Volvamos a lo de cada rueda de prensa... ¿Portero mañana?
―Hoy no lo puedo decir, lo siento.
―¿Cómo ve a Vinicius...?
―No hablo con él, lo veo entrenando y está como siempre. A nivel futbolístico ha llegado a su mejor nivel; bien físicamente, aportando mucho. Siempre es muy peligroso. A veces lo intenta cuando no debe, pero esa es su fuerza, insistir, intentarlo sin parar. Debe hacerlo.
―¿Ha cambiado algo en su gestión de los cambios? Muchas veces no llega a los cinco...
―Ha cambiado la norma, pues ahora se pueden hacer más, así que claro que ha cambiado. Pero yo nunca pienso los cambios antes de los partidos, ya lo dije; aunque soy consciente de que uno puede cambiar la dinámica de todo un partido. Considero que cinco son muchos, pueden llegar a cambiar mucho la identidad de un equipo.
―¿En cuál de las cinco grandes ligas ha sentido más presión?
―Al principio de mi carrera, en la Segunda División de Italia. Ahí me costaba mucho manejar el estrés, hasta el punto de decirle a un asistente que no iba a llegar al 2000. Y aquí estamos, en el 2024, sigo. Poco a poco te acostumbras y entiendes que la presión es la gasolina para hacer mejor tu trabajo.
―¿Por qué es tan complicado jugar contra el Getafe?
―Porque está muy bien organizado y es peligroso. Mayoral lleva 14 goles, son directos, contundentes, agresivos en los duelos. Es un equipo que me gusta mucho y quiero felicitar a mi amigo Bordalás. Fantástico trabajo.
―¿Qué tal se lleva con Bordalás?
―Vivía aquí cuando no entrenaba, pasábamos tiempo juntos, hablábamos de fútbol... compartimos la idea de este deporte, es un amigo. Y le tengo mucho cariño.