Alberto Marcos: “El que no tenga ambición en el Bernabéu, que se quede en casa”

Alberto Marcos Rey (15 de febrero de 1974, Camarma de Esteruelas, Madrid) es historia en el Real Valladolid. El madrileño, formado en la cantera del Real Madrid, es el blanquivioleta que más minutos (40.435) y más partidos (471) ha jugado con la camiseta pucelana en los 15 años que formó parte del equipo de la ciudad del Pisuerga. Después realizó funciones de director deportivo y director de cantera hasta que hace dos años salió de una entidad que siente como suya. El “capi” atiende a AS desde su pueblo, donde pasa unos días, y desde donde irá a ver a su Pucela el domingo.

¿Cómo se encuentra? ¿Cómo lleva el verano?

Muy bien, con muchísimo calor, me he venido al pueblo y estamos fenomenal.

El domingo se enfrentan los dos clubes de su vida...

Pues sí, uno me dio las alas y el otro me dejó volar.

¿Cómo fue su experiencia en el Real Madrid, en su cantera?

Yo estuve cinco o seis años. Yo fui a hacer las pruebas del Madrid con 13 años, había un torneo social. Al año me echaron, me vino a Alcalá, yo quería dejar el fútbol y mi padre no me dejó. Estuve dos años en el Alcalá y el Real Madrid me vuelve a fichar para el sub´19, que era una liga de Primera, pero de esa edad. No se tenía que haber quitado. Ayudaba a ver quién podía llegar y quien no. Voy al sub`19 del Madrid y estoy dos años, iba adelantado, ahí coincido con Víctor Fernández (su compañero en el Real Valladolid y amigo del alma). Yo empiezo a tener luces y sombras. En vez de meterme en el Castilla, en Segunda A, me dejan en el tercer equipo, de Segunda B. En el quinto partido ya me suben al Castilla, juego todo el año, y faltando cinco partidos me suben al primer equipo, la temporada que echan a Benito Floro, que suben Vicente del Bosque y Rafa Benítez, lo cual me abrió todas las puertas. La siguiente temporada jugué entre el Castilla y el primer equipo, y al siguiente salí... por eso digo que conmigo se portaron de maravilla, pero siempre me quedó esa espinita, aunque con el tiempo vas entendiendo que esto es fútbol.

¿Qué le enseñó el Madrid?

Una cosa que ahora se vuelve a hablar mucho. La competitividad que tiene. Ahí te enseñan a ser ganador. Y fue una de las cosas que a mí me chocó en el primer año en el Real Valladolid.

¿Por qué?

Rafa Benítez firma por el Real Valladolid, para jugar en Segunda, la temporada que luego jugamos en Primera (la famosa liga de 22 porque la conversión de los clubes en Sociedades Anónimas Deportivas). Yo tenía ofertas de Primera, pero el Madrid no me dejó salir, quería que me quedara en el Castilla y yo dije que no. Entonces me llamó Rafa y no dudé ni un momento en irme con él a Valladolid, en principio a Segunda, que luego fue Primera. Resulta que, a lo mejor, nos pilló muy inexpertos para jugar en la máxima categoría y lo acusamos. En un partido en Zaragoza (4-3), con Rafa jugábamos como los ángeles, pero siempre perdíamos. En aquel partido entramos en el vestuario, yo llorando porque no me lo creía y uno de los veteranos me dijo: “Tranquilos chicos, ya os acostumbraréis a esto”. Y yo pensaba que eso de acostumbrarse a perder no iba conmigo y eso nos chocó de primeras.

...pero luego en Valladolid, bien...

Hombre, Valladolid me ha dado lo más importante de mi vida: mi mujer y mis hijos... ¿dónde mejor? Ahora puedo estar de acuerdo, o no, con la gente que está en el club, pero para mí el Real Valladolid es lo más alto, lo más grande.

Es que son 15 temporadas de blanquivioleta, siendo historia viva: el futbolista que más minutos y más partidos ha jugado con esta camiseta...

Nadie me lo puede quitar... Y si algún día me lo quitan será de mi agrado porque querrá decir que ha estado tantos años como yo y si lo siente la mitad que yo el Valladolid. A esa persona habrá que aplaudirle y alabarle.

De ese chico que no se acostumbraba a perder a ser capitán y leyenda en el club... ¿cómo fue esa evolución?

Yo he estado más tiempo en Valladolid que en mi pueblo, que es donde nací y viví. Yo sólo tengo palabras de agradecimiento a la ciudad y al club... mi mujer siempre me echa en cara que me gusta más Valladolid que a ella, siendo vallisoletana de nacimiento. Conmigo siempre se han portado fenomenal, yo me encuentro como en casa, para mí es maravilloso, con una calidad de vida espectacular.

Volviendo al fútbol, ¿con quién va el domingo?

No hay duda. Yo voy siempre con el Real Valladolid. Otra cosa es que después de este partido quiero que el Real Madrid gane todos los partidos, menos el de Zorrilla. Además nos ayudará con nuestra pelea (la salvación).

Usted jugó como local en el Bernabéu y muchas veces como visitante... ¿Qué notan los futbolistas cuando juegan en ese campo?

A pesar de lo que están mejorando todos los estadios, el Bernabéu siempre tiene algo especial. Entre los jugadores siempre lo comparábamos con el Nou Camp y decíamos que nos impresionaba más el Bernabéu. Más olla a presión, gradas más verticales y el estadio del Barcelona te condicionaba el terreno de juego, que era enorme. Además, a mí me pilló la época dorada del Barça, así que no hacíamos más que correr. Son dos estadios en los que a cualquiera con un poquito de competitividad le gusta jugar.

... pero, ¿qué significaba para usted?

Era un poco no volver a mi casa, pero sí. Hay gente que esos partidos los juega con rabia. Yo todo lo contrario, volvía para intentar demostrar que sí que era válido para estar ahí. Te llevaba a competir de más.

¿Nunca tuvo la posibilidad de volver?

En un momento dado se habló, en mi segundo año en Valladolid, de que el Madrid podía ejerce su opción de compra, pero claro estaba Roberto Carlos... no sé que iba a pintar yo ahí.

Usted jugó muchas veces allí, ganó... pero su recuerdo más gracioso no tiene nada que ver con eso...

Sí, claro la anécdota más graciosa fue la vez que empatamos allí con un silbido de Harold Lozano que hizo que los jugadores del Real Madrid se pararan. Eso te lleva a pensar que todos los equipos grandes tienen momentos que no están concentrados al 100% y si lo aprovechas lo puedes sacar partido. El colombiano lo entrenaba en los entrenamientos y a Pepe Moré le sacaba de sus casillas y justo lo puso en práctica en el mejor escenario. En el autobús los comentarios eran de cachondeo total y algunos jugadores del Real Madrid nos decían que esto, como la vida, es para listos.

¿Se arrepiente de haber sido futbolista?

Que va. Me puedo arrepentir de alguna cosita, de haber dañado a algún compañero, pero he sido muy feliz y más en Valladolid. 15 años en mi club te curten y no sólo a nivel deportivo. Nosotros, salvo los primeros años que nos mantuvimos ocho o nueve años, luego estuvimos en un tobogán. Era jodido bajar con tu equipo del alma, con tu vida, eso es difícil de gestionar. A mí más que la alegría de jugar la UEFA, me gustaba la felicidad de conseguir un ascenso porque lo que más daño me hacía era bajar.

Del actual Real Valladolid, ¿qué le llama más la atención?

Nos falta entidad, sin querer entrar en polémicas. No se nos puede etiquetar de ninguna manera, no sabemos si queremos tener el balón o queremos ser un equipo armado. Nos falta un poquito de criterio. Si es verdad que cuando estás en tema ascensor, te cuesta un poco más te cuesta hacer un bloque sólido y con pertenencia al club. Eso para mí es fundamental para que lo defienda como algo suyo. Un jugador que pasa uno o dos años en el club no lo puede sentir como quien lleva seis o siete temporadas, no te digo 15 como yo.

¿Y del Real Madrid? ¿Qué me dice?

Por un lado me gustaría ser el entrenador y por otro no querría ni verlo. Sólo ver su plantilla asusta. El Mallorca, bloque sólido, y les sorprendieron. Siempre he dicho que a estos equipos siempre es mejor cogerlos antes de que empiecen a rodar. Lo normal es que perdamos, pero nosotros ya hemos ganado allí. A ellos se les vio un poco atascados en Mallorca.

¿Cree que tiene posibilidades de ganar el Valladolid?

Siempre. Y el que no piense así que se lo diga al míster y éste ponga a uno convencido. Que en tu cabeza esté el tema de que buenos son, a ver qué hacemos... vale, pero el que no tenga la ambición de sacar puntos en el Bernabéu que se quede en casa.

¿Volverá Alberto Marcos al Real Valladolid?

A día de hoy no depende de mí. No salí bien por cuestión de criterios, yo estaba con la cantera y me duele como salí, algo hice mal seguro, pero teníamos 430 niños en escuelas, teníamos un club paralelo, el Deportivo, que teníamos ya casi todas las categorías, y teníamos cantera en la que había 11 jugadores en selecciones inferiores. Ahora es momento de dar tregua, se nos han ido muchos jóvenes talentos y no los hemos protegido. Ahora toca mirar al primer equipo y que vaya funcionando.

Deme un resultado para el domingo...

0-1 con gol de David Torres, canterano, por supuesto.

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