A Pellegrini le falla el plan B

El Betis firmó un empate ante el Girona que resulta insuficiente en su intento por crecer en la Liga y acercarse a la zona Champions. El sueño verdiblanco de dar un salto cualitativo volvió a reflejar carencias de proyecto en su cita liguera tras la apuesta de una rotación que no terminó de funcionar en La Cartuja. A Pellegrini no le funciona el plan B. El chileno decidió reservar a algunas piezas como Amrabat o Abde en el arranque mientras entregaba la enésima oportunidad a algunos secundarios como Rodrigo Riquelme que no terminan de agarrar su sitio.

El caso de Riquelme es particular: el extremo llegó para ser protagonista en este equipo tras la salida de Jesús Rodríguez y el esfuerzo económico realizado para que saliera del Atlético de Madrid. Inició el curso con la titularidad, pero Abde mostró un rendimiento superlativo en las semanas siguientes y el madrileño apenas muestra argumentos convincentes cuando salta a escena. Su titularidad ante el Girona volvió a evidenciar que está lejos de las expectativas, las que generó en su afición y las que él mismo tiene. Su objetivo es encontrar pronto esa versión que pueda convencer a un Pellegrini que se quedará sin Abde en la Copa de África.

Hubo un puñado de carencias en la puesta en escena del Betis tras el parón. Lo Celso apenas apareció en el duelo y se quedó fuera al descanso aquejado de unas molestias. Pellegrini espera mucho más del argentino, que tiene ahora el reto de ganarse de nuevo el sitio ante la irrupción de Isco en esa zona de la mediapunta. La cita ante el Utrecht de este jueves de la Europa League entrega otra carta al técnico verdiblanco para medir el potencial real de su segunda unidad a las puertas de un derbi que también servirá de reválida para muchos de los presuntos titulares.

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