Pellicer puede ser juez en el futuro de Pablo Hernández

Dos históricos del futbol español, dos equipos que en los últimos años han ido de la mano en Primera RFEF y ahora en Segunda División, se volverán a ver las caras este domingo en el SkyFi Castalia, aunque lo harán con sensaciones distintas (sigue el partido en directo en As.com).

Algo más holgados llegan al partido los andaluces, quienes, liderados por el castellonense Sergio Pellicer, están haciendo valer su convicción en casa para sobrevivir con más hechuras en la zona media de la tabla, mientras que su homólogo, el también castellonense, Pablo Hernández está sufriendo más de lo previsto tras una entrada en el banquillo efervescente y ahora una racha más que preocupante que le ha llevado a encadenar entre Liga y copa, cuatro partidos sin ganar ni marcar, y tres derrotas consecutivas.

El partido en el feudo albinegro cobra más importancia hoy en día para el cuadro ‘orellut’ que ve con preocupación la evidente falta de pegada que viene sufriendo y la amenaza de volver a caer al descenso tras haber quemado semanas atrás a su primer entrenador, Johan Plat.

A la vista de la situación, y pese a las dudas que han generado los últimos resultados, Pablo Hernández afronta el partido con la seguridad de que Castalia será su principal aliado para regresar a la senda de la victoria y al camino del gol. Ese es su principal objetivo si no quiere verse obligado a dirimir cuentas con el custodio de la entidad, Haralabos Voulgaris, quien en el pasado ya ha demostrado tener poca paciencia con los técnicos cuando las cosas no han ido bien y este está empezando a ser de nuevo el caso.

Para evitar tal incómoda situación, Hernández tratará de sacar adelante el partido con la baja del central y capitán Alberto Jiménez, quien cumplirá su segundo encuentro de sanción. Por el contrario, recuperará a uno de sus baluartes en el centro del campo, como es el caso del brasileño Ronaldo. El resto de los futbolistas estarán a disposición, salvo Douglas Aurelio quien encara la recta final de su recuperación. De hecho, el once que saltará al césped tendrá poco que ver con el que perdió ante el Antoniano en Lebrija. El portero Matthys, los defensas Mellot, Brignani, Salva Ruiz y Lucas Alcázar apuntan a titulares, así como también jugadores fundamentales como Cala, Cipenga y Jakobsen.

Del cielo al infierno

El Málaga afronta esta visita tras una semana algo más serena después de golear al Andorra, pese a jugar con uno menos por la expulsión de Brasanac, a los 51’ y el triunfo copero en Estepona. Las sensaciones están siendo de montaña rusa y Sergio Pellicer lo explica perfectamente: “En Segunda se pasa del cielo al infierno en una jornada”.

El propósito de los blanquiazules es mostrar una mejor cara fuera de La Rosaleda. El Málaga es uno de los visitantes más ineficaces de la categoría. Solo ha sumado tres puntos (victoria en Las Palmas). El resto, derrotas en Huesca, Burgos, Santander y Leganés. Solo Eibar (un punto) y Sanse (cero) son peores a domicilio y los oscenses, los mismos.

Para no variar el Málaga sufrirá la baja por lesión de rigor. En este caso, el afectado es Chupe. El delantero se resintió en el duelo copero de unas molestias en el muslo izquierdo y, por precaución, Pellicer le deja en casa. Como Adrián Niño sigue en la enfermería, el técnico de Nules solo tiene disponible para esa posición a Eneko Jauregi, que disfrutará de su primera titularidad.

Otro que se cae del once inicial es el antes citado Brasanac, en este caso por sanción. Estas circunstancias pueden conducir al preparador malaguista a meter el bisturí táctico. Podemos ver un ataque de nuevo cuño que le convenció, y mucho, ante los del Principado: Lobete-Jauregi.

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