Ecuador presenta en sociedad a una generación dorada: Plata, Caicedo e Hincapié fulminan a Qatar

Ecuador ha hecho historia al convertirse en la primera selección en 92 años de mundiales en ganar al anfitrión en el partido inaugural. Además, la Tri lo ha hecho arrasando a un combinado qatarí muy inferior desde el primer al último minuto. De esta forma, los muchachos de Alfaro se ponen en el foco e ilusionan a todo un país.

Para mayor dificultad, Ecuador llegaba a este Mundial de Qatar con un equipo inexperto en este tipo de competiciones, de hecho, es la Selección ecuatoriana más joven en la historia de los mundiales, donde estos jugadores en progresión son las estrellas y líderes de cada una de las lineas.

Caicedo, Plata, Preciado o Hincapié son jugadores con sus respectivas carreras recién comenzadas, y todos ellos apunta muy alto en en planeta fútbol cada vez más precoz y competitivo. La capacidad de dominar de Caicedo en una perfecta mezcla de físico, táctica y técnica, el anarquismo alegre de un Plata incontrolable, o el pragmatismo y clarividencia de unos Hincapié y Preciado que montan la base de la salida de balón son argumentos de peso para creeren el equipo.

Mariscal Caicedo

El jugador del Brighton tiene tan solo 21 años, y si nada cambia, puede ser uno de las grandes joyas del próximo mercado. En el encuentro de hoy, Caicedo compartía doble pivote con Mendez, siendo dueños y señores del balón. El mediocentro ha marcado el ritmo de los 90 minutos y ha ahogado el juego qatarí. Uno de los extras de un jugador que protege muy bien a su equipo es esa capacidad de llegar y dar pases interiores que hacen de Moisés Caicedo una amenza completa en sala de máquinas.

La polivalencia de Caicedo convierte a Ecuador en un equipo muy versátil. Tando en el pivote en un equipo con dos líneas de 4, como en el volante en una línea central de 3 jugadores, el jugador del Brighton rinde a un nivel extraordinario, lo que le está haciendo valedor del rol de estrella de la Tri.

Gonzalo Plata es un cuchillo

En un fútbol donde el talento individual y la gambeta cada vez es más escaso, ver a Gonzalo Plata en el costado derecho es una sensación especial. El jugador del Valladolid es anarquismo puro bien entendido, un dolor de cabeza para los rivales. El talentoso zurdo de la Selección ecuatoriana ha mostrado su potencial en una cita mundialista por primera vez, siendo uno de los grandes atractivos del encuentro.

Plata que acaba de lanzar su propio logo para potenciar su imagen como uno de esos jugadores que ganan adeptos a cada minuto, es el conductor del ataque en un equipo que aprovecha muy bien las bandas. La suerte de Ecuador con un jugador tan diferente y desequilibrante, hacen de la Tri un equipo capaz de sorprender a cualquiera. A sus 22 años es indiscutible y uno de los favoritos de la hinchada.

Hincapié, cerrojo y timón

Qatar dejó jugar a Piero Hincapié desde atrás, y eso es un gran error. Ecuador ha dominado y ha dejado sin posibilidades a su rival en todas las facetas, y eso comienza con una solidez que aporta el joven jugador del Lverkusen. El zaguero es uno de los más jovenes dentro del once, y pese a ello es el encargado de ordenar a toda una Selección ecuatoriana.

Hincapié alterna juego en largo, salida por banda, pases interiores y salida limpia del juego desde atrás. Pese a que Ecuador no ha tenido que defender de forma activa, tanto él como Félix Castillo han sofocado los contados intentos de la anfitriona. Una de las fuerzas de esta selección es la capacidad de conceder muy poco, y eso en gran parte es gracias a Piero Hincapié.

Preciado es una agradable sorpresa

Tras el polémico culebrón de Byron Castillo, Ecuador decició no llevar al jugador al Mundial para evitarse problemas, lo que le ha dejado la banda derecha a un Angelo Preciado que ha hecho un magnífico partido. El jugador que milita en el Genk no es uno de los más populares entre los aficionados promedios, pero hoy ha destacado y llamado la atención de mucha gente.

Preciado tiene 24 años y llegó al fútbol belga procedente de Independiente del Valle. Su capacidad física y su aprovechamiento de los espacios le hacen un jugador totalmente complementario con un Gonzalo Plata que tiende a entrar por dentro y lanzar desmarques en diagonal.