Mendilibar hace sonreír al Sevilla

EI Sevilla vuelve a sonreír de la mano de Mendilibar. Los hispalenses vencieron al Cádiz en un trabajado encuentro, con goles de Ocampos y En Nesyri. Con 0-1 en el marcador, los amarillos perdonaron varias ocasiones para igualar y acabaron pagándolo. Primera vez que se marchan los tres puntos del Mirandilla, desde el mes de septiembre. Sergio sorprendió de inicio con las entradas de Negredo y Alejo, dos jugadores llamados a tener minutos desde el banquillo (el primero no jugaba desde enero). Por su parte, Mendilibar apostó por el 4-3-3, primando el físico en la medular con Gueye y Jordán; y Dmitrovic, por Bono en la meta.

La primera parte resultó ser muy disputada entre ambos equipos. El Cádiz comenzó siendo protagonista, como acostumbra en los últimos tiempos en los partidos del Mirandilla. Guardiola fue el primero en poner el uy en la grada, con un disparo a la media vuelta que acabó en córner tras tocar en la defensa. Antes ya hubo en lío de cada día con el Cádiz de por medio, con un posible penalti por mano de Gueye no pitado. El senegalés tocó el balón con el brazo algo extendido. Nada para Soto Grado ni para Medié Jiménez. Una acción que indignó a la parroquia amarilla, que durante esta temporada ha visto en más de una ocasión como esa misma acción se la pitaban en el área propia.

El Sevilla equilibró el partido mediada la primera mitad buscando con centros a En Nesyri (haciendo patente su poderío aéreo) en busca de abrir el marcador. El marroquí no estuvo acertado en el momento clave y el resultado no cambió. Todo quedaba abierto de cara a la segunda parte. El partido estaba para el primero que acertara entre los tres palos y nada más comenzar la segunda parte, Ocampos dejó su impronta. El argentino marcó tras un mal despeje de David Gil en el lanzamiento de córner que cogió desprevenida a la defensa amarilla.

El gol en contra hizo espabilar al Cádiz y los amarillos se vinieron arriba. La entradas de Chris Ramos y Bongonda refrescaron a los amarillos que comenzaron a dominar con claridad. En el 60′, Fali pudo igualar con un remate algo escorado, que se estrelló en el palo. Los de Sergio encontraban profundidad a partir del balón parado con varios lanzamientos de banda y saques de esquina peligrosos que pusieron en aprietos a la zaga sevillista. Guardiola tuvo el empate en sus pies poco más tarde, pero se durmió delante de Dmitrovic y Navas despejó antes de que engatillara. Tanto estaba perdonando el Cádiz que el Sevilla a la primera que tuvo, no falló. Lanzamiento de falta de Badé desde su propio campo, que Bryan Gil regala con un sutil toque a En Nesyri. El caramelo del de Barbate fue aprovechado por el marroquí, con un tiro cruzado para poner el 0-2 definitivo y la sonrisa en la boca de todo el sevillismo.