¿Y qué pasa con Raúl?
El 2-7 al Talavera refuerza las opciones del Castilla al ascenso directo. Mientras desde el club se promociona a Arbeloa, el ‘Siete’ está mostrando credenciales de técnico ya hecho...
El Castilla carbura como hacía tiempo que no se veía en Valdebebas. Raúl está perfilando su obra en el filial, y la última pincelada fue genialidad fue el 2-7 del pasado domingo al Talavera. El Castilla no marcaba siete goles desde hace más de doce años (en febrero de 2011 al Fabril) y nunca lo había hecho como visitante en la antigua Segunda B. Los 57 goles del joven equipo blanco le convierten en la factoría más realizadora de los 40 equipos de la Primera RFEF y sus apenas cinco derrotas en 34 jornadas, el equipo que menos veces ha hincado la rodilla.
Con este torrente de optimismo encapsulado en el Castilla, en Valdebebas corre desde hace tiempo una misma pregunta... ¿qué pasa con Raúl? Las señales que manda el Real Madrid son confusas. De puertas hacia dentro y por supuesto al mundo exterior, se pondera el ADN madridista y ganador de Raúl. Pero también, a la par, se promociona sin tapujos la figura de Álvaro Arbeloa, el entrenador del Juvenil A blanco y se deja caer, como el que no quiere la cosa, que Raúl le haría un favor al club “si dijera que se va al Schalke”. En otras palabras, que yéndose despejase el camino a Arbeloa hacia el banquillo del primer equipo.
En Valdebebas no pasó inadvertido que Raúl no estuviera entre los candidatables cuando Ancelotti estuvo contra las cuerdas este curso y tampoco la enorme pancarta mostrada por la grada de animación, el pasado 2 de abril antes del Real Madrid-Valladolid, con un ‘Eterno Capitán’ y la cara de Arbeloa. Llamó la atención por dos motivos: porque aunque la justificación es que el gesto fue para homenajearle por la Copa del Rey Juvenil ganada tres semanas antes, no es menos cierto que Raúl no recibió el mismo mimo cuando ganó también con el Juvenil A la primera UEFA Youth League de la historia de la entidad. El otro, la consideración de ‘capitán’ a Arbeloa, cuando nunca ha sido ni primer ni segundo capitán del primer equipo y sólo llevó el brazalete en varios momentos muy puntuales...
Una corriente de pensamiento extraña teniendo en cuenta que Raúl está amamantando una generación muy aprovechable a nivel deportivo (a Álvaro Rodríguez le subió directamente del Juvenil B al Castilla, ahora está fogueando al argentino Nico Paz...) y presumiblemente económico. Un futbolista como Sergio Arribas, con 33 goles entre la temporada pasada y esta, saldrá al mercado con el sello Raúl y dejando un previsible traspaso de relevancia.
Las cuentas del ascenso
Un clima que, pese a todo, no perturba a Raúl, buen conocedor de las mecánicas internas de la entidad y completamente focalizado en el objetivo del ascenso. El Castilla está en disposición de recuperar un puesto en Segunda División nueve años después. La misión es limar el punto de distancia con el líder Alcorcón en las cuatro jornadas que quedan para ascender de manera directa. Si no lo logra, habrá una segunda bala, toda vez que el filial blanco tiene casi asegurado un puesto de playoff, ya que aventaja al quinto clasificado (el Celta B) en once puntos. La era Raúl en el Castilla aún tiene mucho por decir...