Riazor persigue el gran premio ante el Barça Atlètic

Llegó la hora de la verdad. Cuatro años después del descenso el Deportivo tiene en su mano la posibilidad de regresar al fútbol profesional este domingo ante el Barcelona Atlètic (19:00 horas) en la antepenúltima jornada de liga. Las cuentas, en principio, son sencillas. Si los de Idiakez derrotan al filial culé estarán en Segunda. Los blanquiazules, que defienden con brazo de hierro el liderato desde hace diez jornadas, han protagonizado un mano a mano con los de Márquez en las últimas semanas y son los dos únicos equipos que pueden ascender de forma directa. En caso de que no llegue la victoria, el Depor todavía tendría red. Si hay empate, le bastará con un triunfo más o empatar en las dos últimas jornadas. Si pierde, seguirá líder con un punto de ventaja, con el golaveraje en el aire ya que ganó en el Johan Cruyff (1-2).

Como no podía ser de otra forma, la excitación en A Coruña es absoluta. En esta larga penitencia en Primera RFEF si alguien ha mantenido la fe y el apoyo ha sido la afición. Más de 28.000 socios, listas de espera para abonarse, récord de entrada en Riazor jornada tras jornada, desplazamientos masivos, papel agotado para el Barça Atlétic desde hace más de dos semanas… Este respaldo incondicional, casi irracional, se vivirá con pasión ilimitada en el estadio y en toda la ciudad. Concentración previa de la afición, recibimiento multitudinario al bus del equipo, iniciativa para llenar de banderas el campo, línea especial de autobuses y espectacular Fan Zone que comenzó los ensayos el viernes con el ascenso del Leyma Coruña a ACB. Apoyo brutal, aunque sin caer en celebraciones antes de tiempo. Las experiencias recientes, en especial la del playoff con el Albacete, están todavía en la retina por mucho que los últimos cuatro ascensos tuviesen por escenario Riazor.

Si en la afición no hay euforia sino ilusión, todavía más en el equipo. Idiakez, que salvó un match-ball en el Johan Cruyff, ha logrado en los últimos meses que toda su plantilla y el entorno hiciese suyo el discurso del ‘partido a partido’. Con esa filosofía, el Depor ha conseguido firmar una segunda vuelta de época en la que marcha invicto tras acumular 13 victorias y tres empates. Claro que los números del Barça Atlètic también son para sacar pecho, con una sola derrota (Unionistas) en ese mismo periodo de tiempo. Cuando se cerró la primera vuelta los dos equipos estaban fuera del playoff. Los coruñeses eran sextos con 29 puntos y los de Márquez, séptimos con uno menos. Así, ambos han seguido una vida paralela de escalada hasta llegar a la cima. Los gallegos, tras sumar 42 puntos de los 48 posibles y los catalanes, 39. La pole es blanquiazul, pero todavía debe ganar el gran premio.

Con la historia, números y lo emocional definido queda lo importante, el verde. En ese sentido, Idiakez recupera a Ximo Navarro después de dos partidos de baja por lesión y decidirá su titularidad justo antes del inicio del partido. Si juega, el técnico coruñés podrá alinear su once de gala ya que también recupera a José Ángel tras sanción. Al frente estará el desatado Lucas Pérez, autor de 11 goles en 2024 y un total de 17 asistencias. El capitán y su zurda estará flanqueado por Mella y Yeremay, los diablos de la cantera de Abegondo. Enfrente también hay jóvenes argumentos para la amenaza. El primero, los 17 goles de Pau Víctor, pichichi de la categoría. Junto a él un Marc Guiu que apunta muy alto, lo mismo que Casadó o el imberbe Bernal. Pólvora y fútbol en ambos bandos para un duelo en el que especular y dudar está totalmente prohibido.

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