Paris Adot: “Si salimos de esta, ya no nos mata nadie”

Paris Alejandro Adot Barandiaran (Pamplona, 26/2/1990) fue el primer fichaje del Deportivo esta temporada. Lateral derecho de dilatada trayectoria, decidió salir este verano de la Ponferradina para recalar en conjunto coruñés con el objetivo de lograr el ascenso. El defensa navarro reconoce sin cortapisas el “delicado” momento que atraviesa el equipo, asegura que la plantilla está con Idiakez, hace autocrítica para admitir errores propios y ve el duro calendario que le espera al Deportivo como “una oportunidad para que sea un punto de inflexión”.

Supongo que está siendo una semana dura después de la derrota en Riazor ante el Celta Fortuna.

Sí, es una semana bastante dura porque ya veníamos arrastrando malos resultados y perder de esta manera un derbi en casa… Parece que hemos tocado fondo y esto tiene que ser un punto de inflexión. Hay que poner ilusión y cambiar esto afrontando el partido ante la Ponferradina como de vida o muerte.

Lo peor, además de los resultados, es que las sensaciones del equipo tampoco son buenas ya.

Sí. Es cierto que tuvimos partidos sin resultados, pero con buenas sensaciones. Últimamente ya no tenemos tantas ocasiones y no estamos metiendo muchos goles. Al final, encajar vas a encajar siempre porque es un juego de errores. Puedes minimizarlo, pero acabarás recibiendo. La realidad es que tenemos que marcar muchos más goles. Eso es un trabajo de todos, defensas, medios y delanteros; tenemos que ser mucho más agresivos arriba. Lo mismo que encajar poco es un trabajo colectivo, aunque haya errores individuales como en Fuenlabrada.

Menciona Fuenlabrada. ¿Qué pasó en el 2-1? ¿Cómo pudo pasar el delantero entre usted y Jaime en el tiempo de descuento?

Dentro del campo las sensaciones son diferentes a verlo desde fuera. Es la última jugada del partido, la fatiga es grande, no piensas bien y cometes errores porque la cabeza no te va bien. Yo lo vi después y no me explicaba qué es lo que había visto dentro del campo. Salí al que tenía balón, veo que hay otro jugador solo, voy y me da tiempo a llegar. Veo que está Jaime, me paro un segundo y luego ya no me da tiempo a llegar. Cometo el error de pararme por intuir lo que iba a hacer mi compañero. Asumo el error como muchísimos otros que suceden. Fue un partido que tuvimos tres mano a mano para marcar el 0-2 y cerrar el partido y luego hubo errores individuales. Asumo el mío y no me escondo.

Al siguiente partido, que fue ante el Celta Fortuna, se fue usted al banquillo…

Eso es fútbol. Yo vengo aquí a sumar. Como te dije, cometí un error y lo asumo. Contra el Celta me tocó salir tras el descanso y traté de aportar con la misma ilusión de siempre. Salí para intentar ganar el partido, pero no pudo ser. La actitud tiene que ser buena siempre y no convertirte en un problema.

¿Qué le parece el debate sobre la necesidad de un psicólogo?

Cada uno somos de nuestro padre y nuestra madre, pero me parece interesante el tema del psicólogo porque uno no aguanta igual la presión que otro, uno piensa de una forma y otro de otra… Yo tuve psicólogos en otros equipos y se pueden hacer cosas interesantes individuales, pero también colectivas; en el campo somos un grupo de 11 y hay momentos difíciles, dudas… Eso se puede trabajar.

¿Jugar en Riazor es una presión para el equipo?

Yo la quiero. Prefiero tener 25.000 personas todos los días que un campo vacío. La presión, si no la sabes llevar, es negativa, pero al final solo quiere decir que la gente de fuera te exige y tú te exiges. A mí me parece bonito. No querer presión y responsabilidades… no veo el fútbol así. Un psicólogo podría hacer cosas interesantes para estos asuntos. Lo que está claro es que tenemos que mejorar. Mejorar en lo psicológico y lo futbolísticos. Mejorar en lo individual y lo colectivo. Hay que hacer autocrítica y trabajar individual y colectivamente. El club nos da muchas posibilidades para trabajar, para tenerlo todo.

A pesar de todo lo que dispone el Deportivo, el equipo está con puntos de descenso y a diez del líder.

Hace dos semanas dije que la liga no se pierde ni se gana en la jornada cinco o quince, pero es verdad que la situación es crítica. Lo comentabas antes, hasta hemos perdido las buenas sensaciones. No hacemos un despropósito, pero las sensaciones no son iguales que al principio. Tenemos que asumir nuestra responsabilidad. Ahora da igual no dar tres pases seguidos, lo importante son los tres puntos en la saca. Estamos obligados a ganar porque la situación es ya preocupante, pero estoy convencido que el equipo lo va a sacar.

Además, el calendario hace que les toque jugar contra los tres primeros en los próximos cuatro partidos.

Eso es una oportunidad para nosotros, tanto en lo deportivo como en lo psicológico para que el equipo recupere confianza. Ahora es cuando tenemos que demostrar; en los momentos fáciles está todo el mundo con confianza y contento. En los momentos difíciles es cuando se ve a los grandes equipos. Yo estoy contento con la actitud del equipo, lo veo trabajando fuerte para salir de esta situación.

El primer escalón es la Ponferradina, su anterior equipo.

Estuve tres años allí y fui muy feliz. Dejé muchos amigos y nunca lo voy a olvidar. La Ponfe me trató muy bien y guardo un gran recuerdo. Va a ser un partido especial, tanto por la situación en la que estamos nosotros como por mi pasado.

¿Cree que en la Ponferradina se entendió su salida?

Tanto el club como yo y la gente cercana, sí. Luego siempre habrá aficionados… no todo el mundo puede pensar igual. La gente no conoce los detalles de cada caso, pero el club y yo, sin problema. Tengo amistad con el presi, empelados…

Pero la decisión de irse fue suya.

Sí, sí.

¿Qué recibimiento espera?

Soy una persona muy cercana y la mayoría de la gente que me conoce creo que dará un buen recibimiento. Luego, si hay quién desconoce más el caso, no lo sé.

¿Y la de Pablo Valcarce?

Creo que ahí habrá un poquito más de resquemor. En verano hubo cosas… pero la gente tampoco sabe bien lo que pasó; muchas veces se opina sin saber. Creo que va a tener un recibimiento más hostil por lo que ha pasado este verano. Hay gente que lo respeta y otras menos, pero son cosas del fútbol y hay que vivir con ello.

Usted conoce bien a la Ponferradina. ¿Qué se va a encontrar el Deportivo?

Conozco al entrenador y tiene las ideas muy claras. También a Yuri, Ernesto, David Soto, Ale Díez… Tienen muy buen equipo y lo están demostrando. El portero, Andrés Prieto, les está salvando. Le he visto unas paradas increíbles y está a un nivel espectacular. Están con confianza y resultados. Los resultados, aunque no hayas hecho buenos partidos, te dan confianza. En su casa es muy peligroso. Yuri, balón que tenga dentro del área y le des medio metro, te la va a enchufar. Con 50 años las va a seguir enchufando. Es un partido muy complicado, a cara de perro para nosotros y para ellos, como para el resto de equipos, el partido del año. Tenemos que ser conscientes y competir con ello; es lo que hay.

¿Cómo ve a Idiakez?

Muy bien. Hemos hablado con él, está convencido y nos ha transmitido esa confianza. Está trabajando como el que más. Estas situaciones, que si la presión, el club, la exigencia… hay a jugadores y entrenadores que les gusta. No la situación, claro, sino afrontar el reto. Ahora, hablando en plata, somos la última mierda, ahí abajo, un desastre… esa es precisamente la oportunidad. Cuando todo el mundo te da por muerto hay gente que se crece y creo que el míster es uno de ellos. De aquí puedes sumar mucha confianza. Si salimos de esta, ya no nos mata nadie. El grupo está con el míster, estamos encantados con él. Como grupo estamos bien y a muerte con el míster.

¿Cómo se ve usted individualmente?

Lesionarte en las dos últimas semanas de pretemporada siempre es complicado porque es cuando estás acabando de coger la forma y te rompe la evolución. Ahora me encuentro bien. El error de Fuenlabrada me va a pesar mucho de puertas hacia fuera, sales en todas las fotos y es la última jugada. Los jugadores tenemos que minimizar los errores, pero también saber que los va a haber. Hay muchos en todos los partidos y cuando acaba en gol, sales en la foto. Hay que asumirlo y yo lo hago. A la vez creo que he hecho muchas cosas bien. Intento aportar en ataque todo lo que puedo, ser profundo, dar una línea de apoyo, crear superioridades… O apoyar a los jóvenes, enseñarles, apretarles… Quitando el error de Fuenlabrada, estoy contento. Cuando el míster me necesite, ahí estaré.

En Ponferrada le toca fijo.

Sí, vale, lo mismo que hubo otros partidos que jugó otro compañero porque el míster lo consideró. Una forma de respetar al club y a los compañeros es salir a tope cuando te toque y con buena actitud cuando no sea así. A partir de hacer eso, llegará todo lo demás. Estoy empezando a estar en un buen momento y lo que deseo es aportar al equipo.

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