Iker Bravo dice adiós al Madrid y Arbeloa le despide: “Todo lo que se necesita es un poco de cariño”
El delantero se despide del club blanco tras dos temporadas: “Gracias de manera muy especial a mi querido Arbeloa y a su staff”. Un técnico que también se ha pronunciado.
C’est fini. Iker Bravo dice adiós al Real Madrid. Dos temporadas después, el delantero se despide. Dos temporadas con vaivenes, pero “mucho aprendizaje”, como detalla en una misiva final donde hay un gran protagonista, Álvaro Arbeloa. “Gracias de manera muy especial a mi querido Arbeloa y al staff. No sólo me han hecho mejor futbolista en todos los aspectos, sino, sobre todo, mejor persona. Me llevo de vosotros la mejor lección de vida”. Iker Bravo no encontró en el Castilla de Raúl el ecosistema para brillar, pero sí un piso más abajo. “A veces, todo lo que alguien necesita es un poco de cariño para revelar su verdadero talento y grandeza”, ha publicado el propio técnico del Juvenil A en paralelo, con otro agradecimiento del joven: “Gracias a ti he podido recuperar mi mejor versión”.
Aterrizó como fichaje de campanillas en el Castilla, tras haber sido el debutante más joven en la historia del Bayer Leverkusen. A los 16 años y 287 días superó a un Florian Wirtz que, caprichos del destino, ahora se relaciona con el Madrid a futuro. A Alemania llegó tras ser una de las perlas más prometedoras de la Masia y el club blanco se impuso a equipos como el Atleti, que también tocaron la puerta del delantero con insistencia para buscar su vuelta a España. Cesión con opción de compra de 10 millones de euros. Tras una primera campaña titubeante (tres goles con el Castilla y otros tres con el Juvenil A), en Valdebebas no perdieron la esperanza y ampliaron el préstamo.
Ahí llegó un momento importante. Iker Bravo consensuó con su entorno que lo mejor era dar un paso atrás en busca de dos hacia delante. Dejar un Castilla donde no entraba en los planes de Raúl para buscar regularidad y recuperar su estado de forma en el Juvenil de Arbeloa. Tras un inicio prometedor, llegó una fecha clave. Un partido en Valladolid donde terminó expulsado. La segunda de la temporada. Entre lágrimas pidió perdón a sus compañeros a posteriori y tuvo una conversación con Arbeloa, que le apoyó. Un ultimátum que fue un trampolín. Desde entonces, clic. Gol tras gol hasta alcanzar la veintena (y seis asistencias). Al final del camino no ha estado la llamada del Castilla, pero sí de una Selección donde regresó en mayo. Ahora apunta a un Europeo donde tiene opciones serias de estar. Adiós a dos temporadas en Valdebebas. En el horizonte, la cita con la selección y la margarita de ofertas (Monaco, Rennes, Torino, Udinese, Union Berlin...) a deshojar...
Comunicado de despedida
Hola Madridistas, ha llegado el momento de despedirnos. Han sido dos años de mucho aprendizaje, de entender la vida con la exigencia de ser un profesional del Real Madrid y, por tanto, de crecimiento y madurez personal.
Gracias a todos mis compañeros que me han hecho la estancia más fácil desde el minuto cero; a los utilleros, fisios y médicos, por esos inolvidables momentos que hemos vivido; a las señoras de la limpieza por conseguir sacarme, siempre, una sonrisa cuando llegaba a la Ciudad Deportiva y, en general, a todo el personal de Valdebebas.
Gracias de manera muy especial a mi querido Arbeloa y el staff. No sólo me han hecho mejor futbolista en todos los aspectos, sino, sobre todo, mejor persona. Me llevo de vosotros la mejor lección de vida.
Gracias a la afición por vuestras cariñosas palabras desde que llegué al Real Madrid y a los medios de comunicación por vuestra generosidad, comprensión y apoyo en un momento crucial de mi vida. Que lo que este sueño un día unió, se mantenga en el tiempo, vivamos lo que nos toque vivir…
Gracias Real Madrid.
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