ENTREVISTA | ESTEBAN SUÁREZ
Esteban: “¿Lucas al Dépor? Yo lo volvería a hacer, pero no se lo recomendaría a mi hijo”
El ex portero asturiano recuerda su salto de Primera División a Segunda B en 2014, y manda un mensaje a la afición deportivista: “Cuando vengan momentos malos, que a la gente no se le olvide el esfuerzo que Lucas ha hecho por estar allí”.
Esteban Suárez (47 años) es hoy, además de un reconocido comentarista deportivo, un responsable padre de familia. Atiende a As de camino a las habituales compras navideñas. “Estuve comentando el otro día en Barcelona y no he tenido mucho tiempo, me ha tocado apurar”, admite entre risas. Pero si por algo se conoce al asturiano es por su bagaje bajo los palos. Retirado en 2017, el de Avilés (Asturias) acumuló más de 600 partidos como profesional. A lo largo de sus 24 años en activo (13 de ellos en Primera División), vistió la camiseta de equipos ilustres del fútbol español como el Oviedo, el Sevilla, el Atlético de Madrid y el Almería, destacando en todos ellos por su profesionalidad y su salud de hierro. Una salud que le permitió acumular más de 460 convocatorias seguidas y le llevó a ser el portero titular del equipo almeriense en Primera a los 38 años.
Pese a ello, en 2014, tras conseguir la permanencia y después de haberlo jugado todo, tomó la decisión de renunciar al año que le quedaba de contrato en el conjunto andaluz y regresar a su casa, el Oviedo, para tratar de batallar en Segunda B. “Cambias el Bernabéu o el Camp Nou por campos embarrados o de hierba sintética, pero yo sentía que tenía que hacerlo. De pequeño iba al Tartiere, y de repente verme allí, con la capacidad de ayudar, me ilusionaba muchísimo”. Su caso recuerda al de Lucas Pérez. Esteban pasó a cobrar cinco veces menos de lo que percibía por temporada en el Almería, y lo hizo, al igual que el gallego, por amor a unos colores. “Me siento muy identificado con él y valoro mucho estos gestos. Este tipo de cosas humanizan al futbolista. Es verdad que trabajamos por dinero, pero hay equipos que te tocan la fibra”.
La presión del regreso
Al avilense le salió bien. En su primer año, el equipo consiguió ascender a Segunda tras más de diez temporadas alejado del fútbol profesional. No obstante, Estaban avisa: “No todo es tan sencillo”. Pese a conseguir el objetivo, la presión durante el curso fue muy elevada. “Hay momentos duros, la gente espera que, al venir de Primera, lo hagas todo bien. Todos los ojos están puestos en ti y muchas veces no es fácil. Cometes fallos. Es una responsabilidad”. El ex-guardameta llegó a la portería asturiana con la necesidad imperiosa de devolver al club a Segunda. “Teníamos, como mucho, dos años de margen para ascender. Si no lo hubiésemos conseguido, no sé muy bien qué sería del Oviedo hoy en día”. Sabe de sobra lo que es llegar a un histórico del fútbol español en horas bajas. Y, por ello, lanza un mensaje a la afición del Dépor: “Va a haber momentos no tan bonitos, momentos en los que Lucas falle goles. Cuando eso pase, que a la gente no se le olvide el esfuerzo que ha hecho por estar allí”.
A los tres años de llegar, el Oviedo acabó prescindiendo de sus servicios, y lo hizo justo el día de su cumpleaños. “Hay esfuerzos que luego no se devuelven, directivos que en ese momento miran por sus intereses y en cuyos planes ya no entras, pero yo siempre he valorado mucho el cariño por parte de la afición. Hice lo que sentía”. Ante la pregunta de si volvería a hacerlo, Esteban es claro: “Yo lo volvería a hacer, pero a un hijo mío le recomendaría que no lo hiciese”.
Pese a todo, el asturiano confiesa sentir entusiasmo por el fútbol de hoy en día. “El fútbol me encanta porque es capaz de esto, de que pasen cosas como la de Lucas. Eso solo lo consigue una empresa que tenga sentimientos, y el fútbol es esa empresa”.