El Gobierno vasco toma cartas contra los ultras: “Son un atentado a la convivencia”

Los cuerpos y fuerzas de seguridad italianos y vascos y el Athletic colaboran codo con codo para que los cafres que ayer lanzaron una bengala a la afición romana en el Estadio Olímpico sean identificados y sobre ellos caiga todo el peso de la ley. El cerco se estrecha y alguno ya está controlado. El consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, ha anunciado esta mañana que no van a descansar hasta tener a raya a este tipo de grupos radicales. “Quiero hacer un llamamiento muy especial a las aficiones deportivas de nuestro país para que hechos como estos no se repitan más”, ha lanzado, además de desvelar los contactos permanentes con la policía italiana. “Son hechos muy graves, actuaciones como la de ayer atentan contra el respeto a las personas, ponen en cuestión la deportividad y, desde luego son un atentado a la convivencia”. Anunció una mayor presencia de la Ertzaintza y dispositivos especiales para las citas del Athletic, Real Sociedad, en la Europa League, y Baskonia, en la Euroliga, el jueves que viene.

El consejero ha recordado que el pasado año en algunas competiciones europeas que se celebraron en Euskadi “se vivieron momentos que no se deberían haber producido” y ha hecho un llamamiento a las aficiones vascas para que no repitan. “Es responsabilidad de todos que actuemos, nos comportemos como es debido y seamos respetuosos con las aficiones de otros clubes”, ha insistido Zupiria, quien no obstante ha afirmado que los datos de Euskadi no apuntan hacia un repunte de la violencia en eventos deportivos

La directiva que preside Uriarte tiene un nuevo reto este año, al margen del deportivo: erradicar los comportamientos violentos de un sector de Herri Norte, un grupo de unos 50 individuaos, la mayor parte indeseables, que vienen dando la nota de forma cíclica con algunas aficiones rivales.. Valverde y sus jugadores salieron ayer a la palestra para condenar los hechos del Olímpico. Los capitanes, De Marcos e Iñaki Williams, fueron a la zona visitante a la conclusión del choque para dejarles claro que su actitud era inadmisible. “No hay que lanzar bengalas al público. ¡Vamos a dar ejemplo, hostia!”, espetó el delantero. Ahora habrá que esperar las consecuencias de este vandalismo. La Comisión de Ética y Disciplina de UEFA tomará cartas en el asunto y lo normal es que imponga una fuerte multa, pero también se puede ver afectado el Athletic en el proceso de venta de entradas para el siguiente desplazamientos, ante el Ludogorets búlgaro. La directiva confía en que no se apliquen las sanciones más fuertes, como el cierre cierre parcial de San Mamés. La exhibición de bengalas en actos incívicos de este calibre se castigan con multas desde los 3.000 hasta casi 20.000 euros. Hace menos de un año, la UEFA multó al Benfica con 25.000 euros y sin entradas para el siguiente desplazamiento en Champions por los incidentes de sus ultras en Anoeta.

La barbarie ultra enturbió un buen empate de los leones en su regreso al Viejo Continente y el estreno de la nueva Europa League. El Athletic condenó el lanzamiento de la bengala. En un comunicado oficial, la entidad rojiblanca apunta en euskera que “Hau ez da gure estiloa (este no es nuestro estilo)” y quiso mostrar “tolerancia cero” ante situaciones como la ocurrida ayer en la capital de Italia. Por ello, quiso expresar su más firme condena “ante los inaceptables actos protagonizados por una minoría de personas que se desplazaron al partido y que estaban ubicadas en la grada visitante”.

“Durante el encuentro -continúa la nota-, este reducido grupo prendió bengalas y lanzó alguna de ellas a la grada local, contraviniendo las normas de seguridad y ensuciando la imagen de nuestra afición, conocida por su comportamiento ejemplar y su apoyo incondicional al equipo en cualquier circunstancia”. Para la entidad presidida por Jon Uriarte, “estas actitudes no representan los valores históricos del Athletic, como el respeto, la deportividad y la convivencia”. Al respecto, recuerda que “el club trabaja siempre por fomentar un ambiente positivo en los eventos deportivos, tanto en San Mamés como en sus desplazamientos, y luchará a destajo para que no se den actitudes que pongan en peligro la seguridad de los asistentes ni que manchen la reputación de nuestra afición. Esta minoría no representa a nuestra afición”.

La junta que encabeza Uriarte agradeció “a la inmensa mayoría” de los seguidores su comportamiento en Roma, ya que “continúan demostrando su compromiso con el club y con los valores que nos hacen únicos y lo han vuelto a demostrar en un desplazamiento de 3.000 personas a la capital italiana sin ningún incidente y haciendo gala con orgullo de nuestros colores e identidad. Este amplio contingente sintió entre pánico y vergüenza. Por último, el Athletic pidió disculpas al AS Roma y a su afición, “que se ha visto afectada por la actitud de estas personas”.

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