PRIMERA FEDERACIÓN | TALAVERA 2 - CASTILLA 7
Dotor y Arribas le hacen un ‘7′ al Talavera
Los dos capitanes lideran una goleada que permite al Castilla mantener el pulso por la primera plaza y el ascenso directo.
Goleada histórica del Castilla, que no marcaba siete goles desde hace más de doce años (en febrero de 2011 al Fabril) y nunca lo había hecho como visitante en la antigua Segunda B. Casi un homenaje a Raúl (2-7) con el que el filial blanco da un golpe sobre la mesa en la lucha por el ascenso directo, aunque Alcorcón y Racing de Ferrol mantienen su ventaja. Dotor y Arribas comandaron la victoria sobre el Talavera en El Prado. El capitán marcó los dos primeros goles (inauguró el marcador a los 34 segundos de partido) y dio otras dos asistencias. El 10, por su parte, hizo un hat-trick con el que ya acredita 18 dianas en su cuenta esta temporada (máximo goleador de los dos grupos de la categoría) y tuvo en sus botas el repóker. Álvaro Rodríguez y Óscar Aranda completaron la goleada mientras que Buenacasa y Neyder anotaron los dos goles de la honra para los cerámicos.
El inicio fue un anuncio de lo que esperaba en el partido. 34 segundos tardó Dotor en penalizar un despiste de la defensa talabricense. Borrón y cuenta nueva, debieron de pensar en las filas blanquiazules, que se hicieron con el balón y presionaron al Castilla buscando un error en la salida de balón que acabó llegando. Mario Martín le dejó un balón muy corto a su tocayo Mario de Luis y este cometió un penalti que no era (en las imágenes no se aprecia contacto) sobre Escudero. Buenacasa no falló desde los once metros para empatar el encuentro.
Parecía un partido nuevo, pero los errores fueron la tónica. Dotor robó un balón a Lassina y armó una jugada que, tras pasar por Álvaro Martín y Álvaro Rodríguez, culminó el propio Dotor. Los dos protagonistas del inicio de esa jugada pudieron acabar su partido a la media hora. Una dura entrada de Lassina dejó al madridista con una aparatosa herida en la espinilla y al marfileño con una amonestación que bien pudo haber sido roja.
Goles de principio y fin
Arribas se encargó de que la primera parte acabara como comenzó y la segunda mitad como arrancó el partido. Dotor se erigió en asistente de lujo para poner un balón a la espalda de la defensa local y Arribas no perdonó, como tampoco hizo en la reanudación cuando robó otro balón a Lassina (vaya día el suyo) y la picó de vaselina ante Biel Ribas. Ambos goles en el 47′.
No había tenido tiempo la afición blanquiazul ni de ilusionarse con la entrada de Álvaro Juan, que antes del gol puso un centro que no encontró rematador. Su entrada dio mordiente a un Talavera al que le gusta tener el balón, pero al que le escasea la pólvora. Neyder recortó distancias en un saque de esquina y Álvaro Rodríguez volvió a ensanchar la brecha con otra asistencia de Dotor. Todo eso dieron de sí unos ocho primeros minutos de frenesí tras el descanso.
El equipo local intentaba minimizar la sangría, pero los insistentes envíos de Álvaro Juan no encontraban rematador. Arribas se animó a completar su hat-trick. Malogró un fantástico pase de Dotor que le dejó solo ante Biel Ribas y dos minutos más tarde no perdonó. Con un Talavera abatido, que ya hace cuentas para ver cuándo puede consumarse matemáticamente su descenso, Óscar Aranda completó el roto en el añadido.