Davo: “Quiero seguir en el Depor y si es posible, mucho tiempo”

Antonio David Álvarez Rey, Davo, (Gijón, 18/12/1994) llegó este verano al Deportivo después de una temporada de blanco y negro. Pichichi en Polonia con el Wisła Płock se fue en enero al KAS Eupen belga, con el que prácticamente no tuvo oportunidades. Después de un año sin ver puerta, rompió su maleficio ante el Logroñés y tres jornadas después marcó el tanto de la victoria en el Johan Cruyff que salvó el primer match-ball de Idiakez. El delantero asturiano, optimista por naturaleza, no contempla una salida en el mercado invernal, cree que en 2024 todo mejorará y está convencido de que el Deportivo acabará ascendiendo.

Otra dura semana después del empate en Riazor ante el Sestao.

Fue un partido en el que no nos salió nada y estuvimos muy imprecisos con balón, pero viendo el lado positivo al menos pudimos empatar y sacar un punto. Pero hay que hacer autocrítica, y hemos hecho mucha durante estos días. Seguimos trabajando para corregir errores.

¿Cómo explica ese bajo rendimiento tras los partidos ante Barcelona B y Tenerife?

Pues a lo mejor fue que después de vernos tan bien nos dio una especie de bajón. Ganar en Barcelona el 90′ con el subidón, la prórroga con el Tenerife… Son partidos que se dan así desde el principio, vas viendo que no te salen las cosas y eso, al final, mentalmente lo notas. Pero tenemos mecanismos para afrontarlo y si nos vuelva a ocurrir, saber afrontarlo.

La situación vuelve a ser límite, especialmente para Idiakez.

Estamos a muerte con él. Estamos contentos con él y trabaja muy bien.

¿Considera que sería un error cesarlo pase lo que pase ante el Arenteiro?

Es algo que no depende de nosotros. Yo puedo decir que nosotros estamos contentos con él y a muerte.

Salvaron un match-ball para el técnico en un campo que no había ganado nadie como el Johan Cruyff y ahora espera otro casi tan complicado, aunque muy distinto.

Vi su partido contra el Sabadell y sí, el campo no es el mejor. Pero es así, son campos de nuestra categoría. Tenemos que ir allí a competir y a por los tres puntos. Sabemos que va a ser muy complicado, cerrado. Hay que ir con el cuchillo entre los dientes.

El Arenteiro solo ha perdido un partido en casa y están empatados con ustedes en la clasificación. Avisados, van.

Sí, sí. Estudiamos a todos los rivales y en su campo son un equipo muy fuerte. Trabajamos las maneras de atacarles y hacerles daño para llevarnos los tres puntos.

Ganar daría algo de paz de cara al parón navideño.

Creo que si sacamos estos tres puntos nos vamos a ir de vacaciones muy cerca del playoff. Dentro no, porque estamos a cuatro, pero hay enfrentamientos directos y sería un buen golpe en la mesa. Nos iríamos a Navidad más tranquilos a dos jornadas del final de la primera vuelta.

O sea, le pide tres puntos a los Reyes Magos.

No. Tres del Arenteiro a Papá Noel y los tres de la Real Sociedad B del 4 de enero en Riazor a los Reyes.

Después de tantas jornadas en media tabla necesitan verse cerca, ya no digo del liderato, del playoff.

Necesitamos encadenar dos, tres victorias seguidas. Sentirnos seguros, fuertes tanto en casa como fuera. Si llega la buena racha, que estoy seguro que llegará, vamos a ver las cosas de otro color.

¿Es usted de los que piensa que todavía queda tiempo para todo?

Sí, sí. Yo soy muy positivo. Es verdad que no tuvimos el mejor inicio de la historia, pero creo que vamos por el buen camino. Esto es como acaba, no como empieza.

En el plano personal, ¿hasta qué punto le liberó el gol de Barcelona?

Tuvo un sabor muy dulce. Fue en el último minuto, agónico, y sirvió para ganar y engancharnos un poquillo. Un delantero vive de los goles y de la sensación de crear peligro. Ese gol para mí fue uno de los más bonitos de mi vida por todo lo que significó. Esa liberación y esos tres puntos van a quedar ahí para siempre. También porque fue contra uno de arriba y como el día del Nàstic, ver que puedes sacar buenos resultados ante los equipos más duros.

Su anterior gol, el del Logroñés, puso fin a un año completo sin marcar.

Dentro de eso hay muchos matices. En Polonia estaba marcado y, cuando firmé en Bélgica, el club sí me quería, pero el entrenador dijo que no contaba conmigo. No me quedó muy claro por qué se hizo ese movimiento. Salí de Polonia con ilusión y al llegar al KAS Eupen me encuentro que en toda una vuelta juego apenas jugué 100 minutos y un partido de titular. Me llevé un palo gordo y cuando salió lo del Depor, ni me lo pensé. Quise venir para España, para estar aquí con mi familia y, además, cerca de casita. El reto de subir aquí es precioso y vamos a hacer todo para conseguirlo.

Hace un mes tuvo la polémica de que si silbaba el público y no ayudaba al equipo. ¿Está usted contento en el Deportivo?

A pesar de todo lo que ha pasado y la situación del equipo, yo estoy muy contento. Todo el mundo sabe que deberíamos estar más arriba en la tabla. Lo de los pitos lo dije sin ninguna maldad, no quiero dar lecciones de nada, menos de deportivismo. Lo único que pienso es que si durante un partido pitas a un jugador, se puede hundir, su rendimiento puede bajar… Entiendo que la afición nos pite a todos al final del partido si el partido es malo, el resultado es malo… Pero eso siempre lo hubo y lo seguirá habiendo. No pasa nada. Yo voy a seguir currando, no soy rencoroso y el primero que quiere subir al Depor, soy yo.

Hubo muchas críticas entonces, pero yo también vi bastante apoyo hacia usted por todo lo que da en el campo. ¿Percibió algo de esta ola positiva?

Eso era lo siguiente que iba comentar. Noto el cariño de muchos aficionados. Al final, hay muchas opiniones cuando metes a 20.000 personas todos los días en Riazor. Yo creo que ninguno coincide con otro en todo. Percibí ese cariño. Los delanteros, hay años que tiras con la oreja y la metes y otra que a puerta vacía te bota antes y la tiras fuera. El trabajo está ahí y creo que nos está faltando un poco de fortuna de cara a gol. Creo que hacemos cosas para estar más arriba.

Sicológicamente, ¿cómo lo lleva todo lo que está pasando?

Personalmente lo llevo bien. Entiendo la presión porque el Deportivo tiene que estar mucho más arriba. Es el cuarto año en Primera Federación y los que estamos aquí somos los que tenemos que hacer que eso cambie. Afición, jugadores y cuerpo técnico tenemos que ir todos en una misma dirección. Hay que ser positivo, si nos ayudamos entre todos vamos a superar todo lo negativo que pueda venir.

¿Entre los delanteros hablan algo de esta mala racha? Los pichichis del equipo solo llevan dos goles y varios son centrales.

Estamos ahí empatados todos con dos goles, sí. Es algo que hablamos y seguro que en el momento que cojamos la dinámica buena los goles van a entrar. Soy de los que creo que esto tiene que cambiar. Ya no sé cuantos balones nos sacaron debajo de la línea, el portero rival hace el partido de su vida, nos anulan goles legales… Eso tiene que cambiar y estoy seguro de que va a cambiar.

Idiakez lo está utilizando tirado a la banda derecha, casi de extremo, que no es su posición natural. ¿Cómo se encuentra?

Somos muchos en la parte de arriba y adaptarme a la banda derecha es lo que me está tocando. Me gusta jugar en cualquier posición de arriba. Es cierto que de cara al gol es la zona en la que se me complica un poco más, prefiero partir del medio o la izquierda. Pero yo intento sumar todo lo que puedo y es lo que hay que hacer; sumar cada uno su granito de arena.

Después del partido del Arenteiro llega el parón y luego se abre un mercado de enero que se espera movido en el Deportivo y usted está cedido. ¿Cómo ve su futuro inmediato? ¿Ha hablado el club con usted en algún sentido?

No, no he hablado nada. Yo estoy centrado en lo que depende de mí, que es trabajar, entrenar, estar disponible para el entrenador y dar todo lo mejor de mí que pueda. Luego, si tiene que pasar algo, ya nos ocuparemos de ello. Yo estoy bien aquí, tranquilo y voy a seguir trabajando en la misma línea.

¿Su intención es seguir en el Deportivo?

Sí, sí, claro. Quiero seguir aquí y, si es posible, mucho tiempo.

Su club en Bélgica se ha puesto en contacto con usted.

No, nada. Pero con ellos, todo muy bien. Es un club muy profesional, Primera División… Yo estaba contento con eso, pero al final vives para el fútbol. Allí no estaba encontrando mi mejor versión y aquí, poco a poco, estoy recuperando la ilusión y la confianza de sentirme bien.

¿Sigue el mismo entrenador en el KAS Eupen que no contaba con usted?

No, ya no está.

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