Balenziaga: “Hay formas y formas de acercarse a los jóvenes, a mí me gusta influir con el ejemplo”

Mikel Balenziaga (Gipuzkoa, 1988) decidió el pasado verano cambiar de aires y buscar nuevos retos tras 12 temporadas en el Athletic de Bilbao. Lo hizo en A Coruña y en un club como el Deportivo, un club del que el propio jugador reconoce tener muchas similitudes con el de San Mamés. Vuelve a disfrutar sobre el césped tras un año sin apenas minutos y ejerce al mismo tiempo de mentor de varios de los chicos de Abegondo que ven en el lateral un referente del día a día del futbolista profesional:

Si alguien andaba todavía despistado por las navidades, partidos como el del jueves enganchan a cualquiera...

No hay más que ver cómo fue el encuentro desde el principio. Muchísimo ritmo, sin tiempo para parar a pensar siquiera en el parón... Creo que hicimos un buen partido, nos llevamos los tres puntos y así da gusto empezar el año.

Cuando se gana sufriendo tanto, ¿Sabe a más que tres puntos?

Estos partidos dan mucha confianza, sobre todo por el cómo. Después de la expulsión tocó sufrir muchísimo. La Real nos sometió con un jugador más, pero el equipo supo sufrir, aguantar y mantenerse en pie. Hubo muchos mensajes entre nosotros y daba gusto ver a nuestros extremos casi jugando de laterales. Es una victoria muy importante.

En todo caso, otro partido en la que son ustedes los que le abren la puerta al rival...

Empezamos bien la segunda parte, esos primeros 10 minutos. Pero llega el gol en una jugada desafortunada. Y es cierto que ahí hubo 10 - 15 minutos que no fuimos nosotros, no estuvimos cómodos con balón ni sin él. Tenemos margen de mejora ahí, hay que solucionarlo.

Muchos achacan estas desconexiones a la presión, al factor anímico...

Está claro que el Deportivo es un equipo que tiene que estar arriba y que en Riazor tiene que sacar casi todos los puntos. No está siendo así. Todo eso que está pasando por supuesto que lleva una presión añadida, pero creo que los jugadores tenemos que estar por encima de esa exigencia y centrarnos en el juego. Hacer lo que hacemos durante la semana.

¿Se siente más cómodo el Depor ante rivales directos?

Los resultados así lo dicen. Hemos perdido muchos puntos contra equipos de mitad de tabla por abajo. Los rivales que vienen de tú a tú nos vienen bien y creo que es así. Cuando tenemos más espacios arriba, nos sentimos más cómodos. Cuando vamos mano a mano, cuando el equipo rival nos deja ir mano a mano, nos va mejor. Y estamos teniendo más dificultades cuando se nos encierran. Al final el peso lo llevamos en casi todos los partidos, pero cuando se nos encierran atrás tenemos dificultades.

La Real B fue el inicio de un mes de enero que puede verse como un problema o una oportunidad. Lo tienen en su mano.

Me gusta esa forma de verlo. Es un enero de oportunidades y de tener ambición. Porque si al final sacamos buenos resultados en esos partidos, nos vamos a ver en una situación que queremos estar y estará en nuestra mano. Es una oportunidad y tenemos que estar preparados para afrontarlo.

Se le vuelve a ver cómodo sobre el césped. ¿Cómo de mal le sentó frenar por la lesión?

Empecé la temporada físicamente muy a gusto. Después tuve esa lesión que me hizo parar tres o cuatro semanas y ahí es cierto que me costó. Me costó arrancar, coger la forma y estuve unos cuantos partidos no en el mejor momento que me hubiera gustado. Pero ya en los últimos encuentros me he encontrado a gusto.

En lo que no hubo dudas fue en su integración. Hablan maravillas de usted en el día a día, sobre todo los jóvenes...

Cuando llegué al Athletic con 20 años, me fijé en gente que me gustaba cómo actuaban. Hoy en día sigo actuando como lo hacían mis referentes. Me siento cómodo en ese rol del día a día, intentando ayudar, hablar... se trata de ayudar al equipo. Es un rol en el que me siento cómodo, me gusta. Es mi forma de ver el fútbol.

Entenderá que no es lo más habitual. A menudo pesa mucho más la individualidad pese a ser un deporte colectivo

Pero es que yo no disfruto si sólo voy a lo mío. Para muchos igual puede ser una actividad extra, pero yo si no lo hago (ayudar a los compañeros), si no me siento involucrado, no me voy contento a casa. Es algo que necesito, que vi desde que llegué a Bilbao y que sigo con ello.

¿Y nota respuesta en los jóvenes? Parece que en los vestuarios cuesta superar a veces el choque generacional.

Yo creo que la sociedad ha cambiado mucho. Todo cambia e igual que los chicos se tienen que adaptar, también los veteranos. Siguiendo unos principios, una manera de trabajar. Y mi manera de trabajar se asemeja mucho más a la de hace 15 años que a la de ahora, pero también he tenido que adaptarme. Es una cosa de todos. Es un cambio de todos, porque si no se rompería la cadena. Nunca he creído en estos veteranos que había que hacer lo que dijeran porque sí, sin argumentos o razones. Intentas que haya una forma de trabajar, pero dándole a los chicos argumentos para convencerlos.

¿Cuál es su fórmula?

Hay maneras y maneras de acercarse a los chavales. A mí me gusta que me tengan en cuenta por lo que hago más que por lo que digo. Que si hay que coger a un chico y decirle cuatro cosas, pues habrá que hacerlo. Pero mi manera de hacerlo y ver las cosas, es que creo que influyo más con el ejemplo. Puede que otros influyan más desde su palabra, pero en mi caso es al contrario.

Después de tanto tiempo en Bilbao... ¿cómo fue el cambio de chip?

Creo que he venido a uno de los clubs que más se parecen al Athletic. Tenía ofertas, pero no la del Deportivo al principio. Cuando llegó, me sedujo por eso. Al final era lo que más se podía parecer. Es un cambio, claro, pero en cuanto a club, día a día, la ciudad y cómo se vive el fútbol aquí, seguramente sea el equipo que más se parezca.

Le quedará una espinita de su último año allí...

Por supuesto que me hubiera gustado jugar más minutos. Pero lo llevé con naturalidad. El fútbol es esto. A todos nos llega el momento de dar un paso a un lado. Me llegó y en diciembre o enero ya hablé con el club y tenía tomada la decisión. El club me apoyó y fue algo que pasa siempre. Lo bueno es llevarlo con naturalidad por ambas partes.

Poco más se le puede pedir a esta temporada...

Como aficionado lo estoy disfrutando muchísimo. Es de los pocos partidos que veo en Primera División y disfruto mucho. Es un buen año para volver a entrar en Europa y les deseo toda la suerte del mundo. Soy un seguidor más.

¿Se esperaba este despegue de Nico Williams?

Este año está siendo todo lo determinante que se veía que podía llegar a ser. Venía de buenos años, pero se está consagrando con goles y asistencias, además en partidos importantes. Si podía decirse que le faltaba algo, era esto.

¿Ve posible llegar a la Champions?

Será difícil. El Girona tiene muchos puntos de ventaja sobre el resto de equipos que están en Europa y luego están los tres de siempre. Pero con el nivel que el Athletic está dando, lo veo factible. La temporada es larga.

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